Cardióloga intensivista – trasplantóloga Coordinadora de la Unidad Cardiovascular del Hospital General de la Plaza de la Salud.
La enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte en el mundo entero. Más de 17 millones de personas mueren cada año por esta razón.
El infarto al miocardio (ataque cardiaco) es la muerte (necrosis) del músculo cardiaco secundario debido a la falta de oxígeno prolongado (isquemia).
Usualmente resulta de un desbalance entre el aporte y la demanda de oxígeno, la cual es más frecuentemente causada por ruptura de la placa con formación de trombo en una arteria coronaria, resultando en reducción del aporte sanguíneo al miocardio.
Clínicamente es un síndrome que puede ser reconocido por una serie de síntomas, siendo el dolor torácico el más frecuente de los síntomas asociados a cambios en el electrocardiograma, cambios en el laboratorio o modificaciones en las imágenes capaces de detectar lesión al miocardio y necrosis.
Primera causa de mortalidad en mujeres. Desde 1984, la mortalidad cardiovascular es más alta en mujeres que en hombres, y a los 12 meses después del infarto las mujeres tienen mayor posibilidad de morir que los hombres.
La frecuencia de falla cardiaca y accidente cerebrovascular es mucho mayor relacionada a un aumento en los factores de riesgo: hipertensión, diabetes, falla cardiaca, depresión y falla renal, y existe un aumento en la enfermedad coronaria entre mujeres de 45 a 65 años.
Las mujeres negras tienen una más alta prevalencia de infartos que otras mujeres, incluyendo una frecuencia más elevada de muerte súbita.
La fisiopatología del infarto es diferente entre mujeres y hombres. En los hombres es más frecuente la ruptura de la placa, mientras que en las mujeres solo ocurre en un 55 %.
La erosión de la placa y la disección espontánea de las coronarias es más frecuente en mujeres que en hombres, particularmente en mujeres más jóvenes.
Etiología. La aterosclerosis es la responsable primaria de la mayoría de los infartos.
Aproximadamente 90 % de los infartos al miocardio resulta de un trombo agudo que ocluye una arteria coronaria aterosclerótica. La ruptura y erosión de la placa son consideradas como el mayor estímulo para trombosis coronaria.
Factores de riesgo. Los factores de riesgo cardiovascular son similares para hombres y mujeres, aunque la potencia de los factores de riesgo cardiovasculares puede diferir.
El estudio “Interheart” mostró que el 96 % de los factores de riesgo en mujeres está relacionado con el consumo de alcohol y cigarrillos, la hipertensión, la diabetes, la obesidad central, la dieta, el sedentarismo, lípidos y factores sicosociales, muchos de los cuales son modificables.
Fumar puede ser un riesgo de infarto más fuerte para las mujeres que para los hombres y la hipertensión es también factor de riesgo mayor para mujeres.
La obesidad abdominal es un factor de riesgo mayor que el índice de masa corporal.
El colesterol HDL, los triglicéridos elevados, obesidad y diabetes, todos frecuentemente ocurriendo juntos, aumentan la probabilidad en mujeres de tener un infarto.
Los factores de riesgo no modificables incluyen edad, sexo, historia familiar de enfermedad coronaria y calvicie de patrón masculino.
Factores de riesgo modificables:
– Fumar o uso de otro tabaco,
– Hipercolesterolemia e hipertrigliceridemia,
– Diabetes mellitus,
– Hipertensión,
– Obesidad (obesidad abdominal),
– Estrés psicosocial,
– Vida sedentaria y o falta de ejercicios,
– Reducción consumo de frutas y vegetales,
-Pobre higiene oral,
– Personalidad tipo A,
– Niveles de homocisteína elevados y
– Presencia de enfermedad vascular periférica.