De los Servicios de Hoy. A causa de la inflación, en Venezuela cuestan más el papel en que se imprime su billete de menor denominación, de dos bolívares, que la moneda misma.

La información aparece en una publicación del diario español El Economista, tomando en cuenta que el billete de más alta denominación de Venezuela, el de 100 bolívares, equivale a 9 centavos de dólar.

Por años se había retrasado la salida a la calle de billetes de mayor denominación, pero con la inflación más alta del mundo -que cerró en 180,9% en 2015-, no quedó otro remedio, indica la publicación. La semana pasada, el presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes, anunció que este año se emitirán billetes de 200 y 500 bolívares (equivalentes a 17 y 44 centavos de dólar, respectivamente), aunque no precisó en qué fecha. La relación de los venezolanos con el efectivo se ha tornado difícil en los últimos tres ejercicios cuando la crisis económica se había enconado, la inflación aumentaba y la escasez de productos básicos se agravaba.

Para comprar un euro son necesarios al menos 12 billetes de los más altos. La subida constante de los precios hace necesario llevar cada vez más dinero en efectivo, lo que no sólo genera problemas de comodidad, sino de seguridad. Un dato muestra por qué esto es tan relevante: Caracas fue recientemente calificada como la ciudad más violenta del mundo y los robos están a la orden del día. Las transacciones bancarias también se han complicado y encarecido. A finales del 2015, se redujo la cantidad diaria que dispensan los cajeros automáticos a 3.000 bolívares.