Hoy 
POR RICARDO RODRIGUEZ ROSA
SANTIAGO.- Arrendatarios de puestos de venta en el Hospedaje Yaque han preferido entregarlos y abandonar sus negocios, mientras otros los han cerrado aunque sigan pagando la renta, debido a que no estaban vendiendo nada.
Así lo explicó el administrador del mercado, Ramón Morales, quien dijo no descartar que el cierre de pequeños negocios se incremente en los días siguientes, por la falta de compradores.
Explicó que hasta hace algunos meses, en la administración del Hospedaje Yaque había registrado más de 400 personas con espacios arrendados, la mitad de las cuales operaban en las calles aledañas a ese establecimiento, donde desde hace años se abastecen de rubros agrícolas pequeños negocios, no sólo de esta ciudad, sino de otras del Cibao.
Manifestó que la razón fundamental por la que arrendatarios de espacios han preferido retirarse definitiva o temporalmente, es porque los productos que adquirían se les dañaban en espera de clientes.
Morales definió el Hospedaje Yaque como un parámetro perfecto para tener la más amplia apreciación del movimiento económico en esta ciudad y el resto del Cibao. “Pues los integrantes de las clases baja y media vienen aquí a comprar los productos que se cosechan en el campo, adquiriéndolos casi a mitad del precio que los compran en otros lugares”, añadió el funcionario.
Sostuvo que la falta de dinero está alejando paulatinamente a los clientes tradicionales, lo que provoca grandes pérdidas entre los vendedores, pues muchos de los productos se les dañan.
La versión de Morales fue corroborada por Nicolás Marte, quien se quejó de que, en adición de los pocos compradores que ahora visitan el Hospedaje Yaque, algunos productos agrícolas en los últimos días han subido de precios.
Se pudo comprobar que la libra de yuca que la semana pasada se vendía a RD$3.50, ahora se cotiza a RD$5.00 y un aumento similar se siente en el ciento de naranjas de jugo. Los plátanos y los guineos mantienen los precios de semanas atrás, pero la vendedora Amalia Toribio dijo que no importa el tamaño de los mismos, “porque por igual poca gente viene a comprar y todo porque el circulante casi no se percibe”.
