Los curas párrocos y sacerdotes de la Zona Pastoral Ozama iniciaron una campaña contra el ruido que propagan los colmadones, billares y licor store.
El ruido sigue siendo el mayor problema que sufren sus barrios, así lo explicaron durante una rueda de prensa realizada en el salón de conferencia del Centro Bonó: Antonio Méndez, de la Zurza, Pablo Mella, Gregorio Astacio de la Parroquia Jesús Maestro, Abraham Apolinario de la Parroquia Santo Cura de Ars y José Ramón del Ensanche Espaillat.
El sacerdote Méndez, quien es el coordinador de la campaña que se realiza a propósito de la cuaresma, dijo que ante la indiferencia de las autoridades los dueños de los colmadones se burlan en la cara de sus vecinos descontentos, haciéndolos sentir impotentes ante la situación.
Muchos de los centros ruidosos son focos de delincuencia donde se promueve el consumo de alcohol por parte de los menores, el uso de drogas y actos de violencia entre los ciudadanos, expresó el padre Apolinario.
Los curas mostraron su malestar ante los elevados niveles de contaminación acústica que soportan día a día mientras los funcionarios policiales, el Ministerio de Medio Ambiente y las autoridades del Ayuntamiento del Distrito Nacional no hacen nada frente al desorden.