POR LLENNIS JIMÉNEZ
El vicepresidente de la República, Rafael Alburquerque, dijo ayer el gobierno comenzó a distribuir tarjetas de crédito de las denominadas «solidarias» en 90,000″ hogares pobres y que a final de año se harán entregado 200,000. El programa piloto funciona en ocho sectores del Distrito Nacional, indicó.

Alburquerque, quien preside el Gabinete Social, indicó que el programa «Comer es Primero» desde mediados del próximo julio activará las tarjetas para adquirir alimentos por RD$550 mensuales.

El programa, explicó, tiene una segunda etapa que empezará con el año escolar en agosto y septiembre y que permitirá a cada titular de tarjeta obtener RD$300 adicionales por cada hijo que tenga en la escuela en edades comprendidas entre los seis y 16 años. Cubrirá hasta dos estudiantes, indicó.

Explicó que representantes regionales y provinciales del programa operarán las oficinas donde se entregarán las tarjetas y hacer reclamaciones.

«Se está montando, a partir de mayo toda una red de solidaridad, una red social con organizaciones no gubernamentales, con iglesias, juntas de vecinos, organizaciones populares, que también nos van a servir de apoyo», precisó Alburquerque en el programa Hoy Mismo.

Señaló que el 76% de los favorecidos considera que la tarjeta es una buena ayuda, de acuerdo a una encuesta que hicieron organizaciones de la sociedad civil donde ejecutan el plan piloto desde septiembre pasado. Estos barrios son Villas Agrícolas, Gualey, La Zurza, 24 de Abril, Villa Juana, Capotillo, María Auxiliadora y Domingo Sabio.

Alburquerque señaló que el gobierno comenzó el programa Comer es Primero en las 13 provincias más pobres del país, entre ellas El Seibo, Hato Mayor, Monte Plata, Dajabón y Azua.

Dijo que en Monte Plata distribuyeron 18,857 tarjetas y hay 63 colmados que venden alimentos usando estos medios de pago. Esto cuesta al gobierno RD$10,371,350 mensuales.

En San Juan de la Maguana, indicó, se repartieron 20,467 tarjetas y hay 68 colmados. Allí se pagan RD$11,256,850 mensualmente.

Explicó que los beneficiarios deben firmar un documento de compromiso que exige que el hijo que esté declarado ante una Oficialía del Estado Civil y que la asistencia promedio a la escuela sea de 85%.

Alburquerque dijo que el programa es exitoso.

Consideró que esto no es más que una de las repuestas que da el gobierno a la pobreza, pero que existen otros programas, como el Plan Social de la Presidencia, los comedores económicos y el Instituto de Estabilización de Precios (INESPRE). Además, los de la secretaría de Salud Pública y el desayuno escolar.

Dijo Alburquerque que son excluidos del programa las personas cuando consiguen un empleo o montan un pequeño negocio.

Alburquerque sostuvo que los programas estarán monitoreados y que las oficinas tendrán la responsabilidad de evitar injusticias, como personas que se queden fuera o que quienes estén dentro carezcan de las condiciones para recibir la tarjeta.