POR LLENNIS JIMÉNEZ
El Primer Tribunal Colegiado de Primera Instancia de la provincia Santo Domingo conocerá hoy el juicio contra tres hombres y dos empresas, a quienes las telefónicas CODETEL y TRICOM acusan del robarles cableado del servicio de teléfono y a quienes demandan en reparación y daños por más de RD$39 millones.

Virgilio Antonio (Tony) Núñez Valdez y Fabián José Reyes Núñez están supuestamente implicados en el negocio ilegal de cables telefónicos y del suministro de electricidad, al igual que las empresas Abastos Industriales, C, Por A. y Reciclajes Unimer, C. Por A., de la que son sus principales accionistas y ejecutivos.

La audiencia está prevista para las 9:00 de la mañana, bajo los cargos de crímenes de asociación de malhechores, por violación a los artículos 59, 60, 62, 379, 383 y 385 del Código Procesal Penal.

Núñez Valdez y Reyes Núñez son señalados como cómplices por alegadamente dedicarse a comprar cables que les fueron sustraídos a la Compañía Dominicana de Teléfonos, C. Por A. (CODETEL) y a TRICOM, S.A. y por supuestamente almacenarlos en sus empresas, la que figuran demandadas como terceros.

Otra persona implicada en el caso es José Luis Aybar Germosén, encargado de una de las empresas involucradas en el hecho.

En su acusación, CODETEL explica que procura una demanda civil de RD$39,866,973.71, debido a que en el año 2005 le efectuaron 475 robos de cables, por un valor de 17 millones, 900 mil pesos. CODETEL indicó que en el año pasado al catorce de marzo había sido víctima de 200 sustracciones de cables, por un valor superior a los RD$7 millones. Estos valores no incluyen, aclara, los costos de reposición.

Esta telefónica asegura haber invertido RD$7,005,067 en la reposición del cableado que le fue sustraído de sus redes en el 2006.

Por concepto de daño moral a la imagen de la empresa, que participa en el proceso legal como actora civil, CODETEL procura una indemnización de RD$15 millones. Argumenta que le causó abruptas interrupciones en el servicio telefónico a un número importante de empresas y familias, como consecuencia de la pérdida de sus cables.

A los implicados se les acusa de supuestamente comprar los cables robados de manera habitual, retenerlos, conservarlos, ocultarlos en sus instalaciones, para posteriormente, exportarlos.

A los acusados se les atribuye haber sido sorprendidos, en varios allanamientos, con cables telefónicos robados en su poder, tanto con alambres de cobres en Abastos Industriales, como con alambres de CODETEL y TRICOM supuestamente guardados en Reciclajes Unimer.

Las telefónicas cuentan en su querella acusatoria la forma cómo son robados sus cables, al igual que los del servicio eléctrico, para sustraerles el cobre, y luego, venderlos a metaleras, chatarreros, intermediarios o exportadoras.

La compañía CODETEL tiene como abogados a Juan Tomás Vargas Decamps, Ignacio A. Miranda Cubilete, Teobaldo Durán Álvarez y Manuel Sierra Pérez.

La empresa TRICOM, con calidad de actora civil, está representada por los abogados Otilio Hernández Carbonell, Griselda Cordero de Hernández y Carlos Moisés Almonte.

En tanto, los implicados: Núñez Valdez, Reyes Núñez y Aybar Germosen, quienes rechazan la acusación y dicen haber efectuado las compras de cables de manera legal, son representados legalmente y de manera conjunta lo mismo las dos empresas demandadas- por los abogados: George Andrés López Hilario, Félix Damián Olivares y Julio Miguel Castaños Guzmán.