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La Secretaría de Obras Públicas y la Oficina Nacional de los Fondos Europeos de Inversión (ONFED) iniciaron la construcción y extensión del puente de Sabana Larga, en la sureña provincia de San José de Ocoa, cuya inversión asciende a 968,000 euros.
De acuerdo con los responsables de la obra, la compañía GEO Construcciones, ésta sería concluida al término de ocho meses. La supervisión y fiscalización de los trabajos estará a cargo de las instituciones ya mencionadas.
La nueva obra tendrá un muro de cuatro metros de altura, con rocas de 60 centímetros de diámetro, y una estructura de defensa que pueda resistir las embestidas de las inundaciones.
Para complementar los trabajos se canalizarán las aguas del río Ocoa, cuya crecida tras el paso del huracán Ike a principio de agosto- destruyó el referido puente que es la principal vía de acceso hacia San José de Ocoa.
El puente de Sabana Larga había sufrido otros daños en uno de sus aproches, por las inundaciones provocadas por las tormentas Olga y Noel, en 2007.
Los daños continuaron en agosto de este año, causados por las tormenta Gustav y Hanna.
Estudios de factibilidad. El ingeniero Víctor de la Cruz Martínez, representante de la compañía que tendrá a su cargo la ejecución de los trabajos, aseguró que la extensión del puente estará lista en ocho meses.
Asimismo, explicó que realizaron estudios de suelo con el propósito de establecer las nuevas bases, a fin de que puedan soportar nuevas embestidas ante la crecida y desbordamiento del río Ocoa.
Reiteración. Desde hace más de diez años la comunidad de San José de Ocoa enfrenta problemas de comunicación cada vez que ocurren inundaciones, porque los aproches del puente sobre el río Ocoa no resisten sus embates.
En 2007, cuando las tormentas Olga y Noel afectaron el país, situaciones similares vivieron los moradores de esa provincia que, esperan, que la obra sea más resistente.
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Los daños
La provincia de San José de Ocoa, situada en la Cordillera Central, fue una de las más devastadas por el huracán Ike. Miles de personas tuvieron que ser evacuadas, y 300 familias perdieron sus viviendas.
La agricultura
Ike dejó pérdidas millonarias en esta provincia, porque sus aguas anegaron los cultivos de vegetales y papas.
