Iniciaría en febrero autopista eléctrica

Iniciaría en febrero autopista eléctrica

POR ANSELMO SILVERIO
SANTIAGO.-
El vicepresidente de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Radhamés Segura,  anunció anoche que el gobierno dominicano iniciará el mes próximo la construcción de la autopista eléctrica entre Santo Domingo y Santiago,  e informó que avanza la  revisión de los contratos con la Smith & Enron y la  Cogentrix.

Asimismo, Segura dijo que el próximo lunes se abrirán las ofertas para la construcción de dos centrales de 200 megavatios, en Manzanillo, Monte Cristi y en Hatillo, Azua y otras en Pinalito de 50 megavatios, Palomino de 100 megavatios, La Placeta, de 87 megavatios Artibonito de 47 y la de Bejucal  que está en estudio.

Segura declaró que con estos y otros proyectos el gobierno se propone reducir los costos operacionales, los niveles de pérdidas y aumentar la generación de electricidad que a final del 2007 o a principios de 2008 se traducirá en un descenso de la tarifa energética.

En cuanto a la energía no convencional, Segura dijo que el gobierno encamina un proyecto para aumentar a 116 megavatios  con plantas de costos bajos que desplazarán aquellas de operaciones costosas y las plantas obsoletas.

El funcionario de la CDEEE habló anoche en la ceremonia de inauguración de las nuevas oficinas administrativas de Edenorte,  ubicadas en la avenida Juan Pablo Duarte casi esquina José María Cabral y Báez, donde el arzobispo de Santiago bendijo la obra y abogó por la búsqueda de alternativas para un mejoramiento del sistema energético nacional.

Al abundar sobre el caso de la autopista eléctrica, Segura expuso que esto permitirá un intercambio  energético entre Santo Domingo y Santiago con niveles de pérdidas mínimos que ayudará al reducir el déficit de generación, con un anillo de línea que entrelazará los pueblos del Noroeste, el Norte y el Cibao Central.

Aseguró que estos proyectos tienen el objetivo especial de aumentar la capacidad eléctrica del país, al tiempo que afirmó que mientras se trabaja, no se permitirá la sustracción de energía, el servicio hay que pagarlo, aunque reconoció la alta tarifa y los tediosos apagones,   ya que el gobierno no puede subsidiar el suministro que anda por los US$90 millones mensuales.

“Nosotros mantenemos el concepto de disminuir las pérdidas y aumentar la generación, pero también, elevar las cobranzas y controlar los gastos operacionales”, significó Segura.

Por su lado,  Manuel Suárez,  gerente de Edenorte informó que existe un proyecto de ahorro en esta empresa de US$1.5 millones, aunque señaló que esta es una de las etapas más críticas de esta firma distribuidora.

Indicó que se trabaja en un proyecto de bajar y finalmente  eliminar el uso de plantas de emergencia e inversores.

En la ceremonia estuvieron presentes Marcelo Bermúdez, presidente de Edenorte, Francisco Méndez, superintendente de Electricidad, Rubén Montás, director ejecutivo del consejo energético,  y Fernando Rosa,  gerente de Edenorte, entre otros.

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