POR JORGE RAMOS
Con el concierto 1.697 de la Orquesta Sinfónica Nacional en el Auditorio de la Casa  San Pablo, la Secretaría de Estado de Cultura y la Fundación Sinfonía dieron inicio el miércoles a la Temporada Sinfónica Otoño 2004.

Los organizadores de la importante actividad, que cuenta con el apoyo de la Embajada de los Estados Unidos de América, se vieron obligados a cambiar de escenario este año, debido al mal funcionamiento del acondicionador de aire del Teatro Nacional.

De todos modos, el concierto contó con una buena asistencia, a pesar de que los laterales del auditorio estaban un tanto vacíos. Inició a las 8:40 de la noche con la interpretación del Himno Nacional.

En su primera parte el programa incluyó la Obertura de la opereta “Candide”, de Leonard Bernstein, seguida de tres movimientos del concierto para violín y orquesta en Re mayor, de Tchaikovsky, donde el concertino norteamericano David Kim dio muestras de su virtuosidad como violinista, mereciendo así los más fuertes aplausos del público.

Tras el intermedio, la segunda parte de la apertura de la Temporada Sinfónica correspondió a la  Sinfonía No. 9 en Do mayor (La grande) con tres movimientos.