El Gobierno ha declarado de interés nacional reemplazar con gas natural el costoso petróleo. Las conveniencias financieras y ambientales de este paso son bien conocidas y el sector empresarial ha hecho cuantiosas inversiones para el cambio.
Sin embargo, entre empresarios han surgido inquietudes que deben ser atendidas a tiempo por el Gobierno. Una está basada en que el suministro de gas natural está controlado por una sola empresa, y la otra es que después de que el sector empresarial ha hecho cuantiosas inversiones para la conversión, el precio convenido para el gas casi se ha triplicado, sin razón aparente, al pasar el millón de BTU (Mmbtu) de US$8 a US$22.
Si las cosas están como las plantea un sector del empresariado, lo más probable es que el precio del gas natural para el transporte y otros menesteres aumente sustancialmente de precio, restándole estímulo a la conversión que, por cierto, es bastante costosa.
Debido al carácter prioritario que el Gobierno atribuye a la migración de combustibles fósiles a gas natural, sería aconsejable que haya apertura para que otros sectores puedan importar y distribuir este combustible y reglas que impidan cualquier tipo de distorsión en los precios que no se correspondan con fluctuaciones del mercado internacional. Hay que atender oportunamente estas inquietudes del sector empresarial.
Consejos oportunos
Actualmente muchos sectores afrontan problemas de abastecimiento de agua, entre otras cosas porque no han concluido las reparaciones por los daños causados por el paso del huracán Irene.
La situación ha obligado a la gente a abastecerse de agua de donde aparezca y almacenarla, no siempre en condiciones adecuadas, lo que implica riesgos para la salud de la familia.
En estas circunstancias, el Ministerio de Salud Pública aconseja limpiar bien los envases, agregarle cloro al agua a razón de cinco gotas por galón, cubrir bien los recipientes de almacenamiento y asegurarse de la buena calidad del agua antes de consumirla.
Llevar al pie de la letra estos consejos es una especie de vacuna que nos librará de muchas enfermedades provocadas por microorganismos contenidos en agua no purificada.