De una entelequia que solo servía para apetecer intereses puramente políticos y personales, y que provocó que amplios sectores exigían su desaparición, la Liga Municipal Dominicana (LMD) ha sido convertida en el principal soporte de los cabildos de la República Dominicana.
Para sacarla de las garras del clientelismo político, el presidente de la LMD, Víctor D´Aza, se enfocó desde el principio de su gestión en tres aspectos claves: transparencia, fortalecimiento de capacidades y mejores servicios.
“Somos una institución al servicio de los gobiernos locales, para elevar sus capacidades de acción, en beneficio para que la gente viva mejor en cada una de sus comunidades, tal y como es el propósito del programa de gobierno del presidente Luis Abinader”, narra.
Para ello, precisa, despliega un conjunto de medidas y apuestas dirigidas a transformar la municipalidad, con la reestructuración y calidad del gasto de la institución como ejemplo para los gobiernos locales.
Para lograrlo, designó a 12 técnicos regionales, más ocho del Ministerio de Administración Pública (MAP), para trabajar directamente con las alcaldías los aspectos de control interno y gestión financiera.
Asimismo, explica, el desarrollo de sistemas informáticos para fortalecer la transparencia y la gestión, portales transaccionales, Sistema de Información de la Gestión Financiera (Sigef) y Municipalidad en tus Manos.
De igual modo, trabaja en el fortalecimiento del Sismap municipal como herramienta de monitoreo de la gestión y los servicios municipales, al tiempo que propone integrar el monitoreo de la convivencia y seguridad ciudadana, además de residuos sólidos.
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Fondos e incentivos
Resalta el Programa de Apoyo a los Gobiernos Locales con fondos asignados por la Presidente de la República y ejecutado por la Liga, para fortalecer la infraestructura local con la que se brindan los servicios municipales
Destaca como uno de los aspectos que ha dado buenos resultados en la actual gestión, el programa de incentivos a la buena gestión municipal.
Lo divide en siete categorías como: desempeño institucional, superación institucional, satisfacción ciudadana con los servicios, territorio más limpio, impulso a la transparencia, estímulo a la carrera administrativa y desarrollo fronterizo.
Capacitación constante
La formación a los gobiernos locales, dice, se desarrolla a través del Instituto de Capacitación Municipal (ICAM), con formación oportuna; como por ejemplo, la realizada recientemente en materia de manejo de nuevas tecnologías para el planeamiento urbano.
Pero, además, indica, la LMD ha concluido maestrías, diplomados y otros cursos especializados con los alcaldes, directores de distritos municipales, regidores, vocales y personal administrativo de las alcaldías.
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Otros aportes
Subraya, también, aportes a los cabildos para que fortalezcan los programas de aseo en sus territorios, con entrega al día de hoy de más de 150 camiones compactadores a cabildos de distas partes del país, municipios y distritos municipales, sin importar bandería política.
Para la entrega de los equipos, resalta, que no se toma en cuenta el tamaño del municipio, sino, la urgencia, ya que algunos son pequeños, pero que tienen muchas necesidades por los pocos recursos que reciben, mientras que otros grandes, tienen una gran producción de residuos sólidos, por tanto, nunca sobra un camión.
Cumple su rol
Señala que la LMD ha sido fortalecida con la incorporación de personal altamente calificado en planificación, maestrías en gestión, medio ambiente, ingeniería, agrimensores, topógrafos, abogados, economistas, contadores, administradores, estadígrafos, y otros, que han cambiado la cara a ese órgano asesor técnico de las alcaldías.
“Es decir, los que las alcaldías necesitan para que se pueda dar realmente una asistencia técnica”, explica el presidente de la LMD.
Ese personal, apunta, está para servir a los gobiernos locales que lo necesiten, con lo que la LMD cumple el rol para la que fue creada en 1938, mediante la Ley 49.
Con ese objetivo, dice, la entidad ha diseñado un sistema de tal forma, que un municipio pequeño no tenga que contratar a un arquitecto para diseñar un parque, un matadero u otra obra, sino, que la LMD lo asiste en ese sentido.
De igual modo, asisten a los municipios en la elaboración de los presupuestos y las cubicaciones de obras, así como en el manejo de los recursos que reciben, lo que no había sucedido nunca en ese órgano.
Modificar la ley
La Ley 176-07 del Distrito Nacional y los Ayuntamientos ya cumple 14 años, y la Constitución manda convertirla en orgánica, razón por lo que existe una propuesta de modificación que está en mano del Poder Ejecutivo para que la someta al Congreso de la República.
Según D´ Aza, el anteproyecto preserva algunos avance de la legislación actual, pero, al mismo tiempo, incorpora otros como los servicios mínimos, porcentajes en la distribución de los fondos, para que sean mediante un proceso gradual hasta tanto los cabildos puedan manejarlos de manera diferenciados.
“La idea es que haya un criterio poblacional, pero también otros como el tamaño territorial, complejidad para la prestación de los servicios, distancias y otros criterios que se sugieren”, expone el municipalista.