Duvergé. INDEPENDENCIA. El Plan Nacional Quisqueya Verde ha logrado incorporar a decenas de cabezas de hogares  haitianos en el proceso de reforestación de comunidades afectadas desde hace años por la tala indiscriminada de árboles.

Estos grupos de haitianos   tienen la misión de recuperar las cuencas hidrográficas de esta zona donde nacen importantes ríos y arroyos, actualmente en peligro.

                  En los últimos años, a través de Quisqueya Verde y Frontera Verde, en la comunidad de Zapotén en la frontera de República Dominicana y Haití, han sido plantados  más 150 mil matas de graviléa, pino criollo y cedro, entre otros.

                 En estas comunidades laboran dos brigadas compuestas por cabezas de familias haitianas, las cuales reciben incentivos económicos mensuales del gobierno dominicano, a través del Plan Nacional Quisqueya Verde y Frontera Verde.

                 El gobierno  invierte anualmente más de RD$1.5 millones en el pago mensual de las brigadas y la producción de plantas, así como en la compra de herramientas y aperos de trabajo, que son entregados a los integrantes de las dos brigadas, según explicó el director de Quisqueya Verde, José Enrique Báez Ureña.

               Indicó que el proyecto de Zapotén en tan sólo 18 meses promoviendo la reforestación en terrenos dominicano y haitiano, con la colaboración de familias del vecino país,  ha integrado a organizaciones sociales, iglesias y entidades comunitarias a la defensa de los recursos naturales de la zona.

“     El éxito del proceso de reforestación en estas dos poblaciones de República Dominicana y Haití ya puede ser exhibido a través del crecimiento de los árboles plantados por los dominicanos y haitianos“, explicó Báez Ureña.

             El impulso a las labores de reforestar en  la frontera se inició en octubre del año 2008, por iniciativa del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, luego de  la  designación del doctor Jaime David Fernández Mirabal en esa  institución.

 Las brigadas son dirigidas por mujeres, quienes han puesto empeño en el cumplimiento de las tareas de siembra y conservación de los árboles plantados en los terrenos fronterizos de ambos países.

           Báez Ureña encabezó un recorrido junto al técnico  Pedro Taveras.

Las claves

1.  Familias haitianas

Al plan de reforestación han sido incorporados decenas de cabezas de familias haitianas, con el fin de reforestar amplias zonas que fueron deforestadas desde hace años por la tala indiscriminada de árboles en comunidades de la zona fronteriza.

2.  Recursos económicos

 El gobierno dominicano invierte RD$1.5 millones en el pago mensual de las brigadas y la producción de plantas, así como en la compra de herramientas y aperos de trabajo, que son entregados a los integrantes de las dos brigadas.