Inudaciones y ríos crecidos causan dos muertes

<p><span>Inudaciones y ríos crecidos causan </span>dos muertes</p>

Por Yluminada Pérez y Santiago González
NAGUA.- Dos personas murieron arrastradas por la crecida del río Riote, en el municipio de El Factor, la tarde de ayer producto de las fuertes lluvias que se originan en la provincia María Trinidad Sánchez y que ha incomunicado a unas treinta comunidades rurales.

El agricultor Fabio Bonilla de 30 años, murió al tratar de salvar la vida del menor José Alberto Hernández Tapia de 14 años de edad, quien fue arrastrado por la crecida del río Riote, ambos tenían su domicilio en la calle Luis María López de este municipio y sus cuerpos serán sepultados en la mañana de hoy.

  Gilberto Bonilla, hermano de una de las victimas, dijo que su pariente salió a las once de la mañana a darle vueltas a varios animales y a su producción arrocera, cuando se percató de que un familiar había sido arrastrado por la crecida del río, iniciando la búsqueda junto a un grupo de la comunidad, encontrando a las 4:00 de la tarde ambos cuerpos abrazados en el río el Barro de esta localidad.

     Unas 30 comunidades rurales de Nagua como El Factor, Cabrera y Río San Juan, se encontraban incomunicadas por el desbordamiento de los ríos El Papayo, Helechal, Caqui, Boba, Los Pontones, El Guasazo, Los Memizos, El Vaden, Marco, Caño Azul y Río San Juan, productos de las lluvias caídas desde hace cuatro días.

     Las comunidades que han sido afectadas por los aguaceros son: Cinta Negra, Esquina Caliente, Los Indios, La Pieza, Caya Clara, Las Corocobas, Palmar de los Sánchez, Cuesta Colorada, Los Pinos, Quebrada Amarilla, Vuelta Larga, Plamarito, Laguna del Caimán, La Totuma, Alemania, Monte Llano, Los Cuervos, Canta la Rana, El Bote, La Lometa, La Cubana, La Caribe, entre otras. Sus habitantes están a la espera que pasen las lluvias para sacar sus productos al mercado, ya que tienen varios días que no lo hacen debido a las crecidas de los ríos.

Mientras tanto, dos días de lluvias sobre la región Norte y Noroeste del país ha provocado dificultades a residentes de comunidades rurales con problemas de caminos vecinales, pero las precipitaciones no han ocasionado daños a la agricultura, ni a las propiedades.

Los aguaceros se mantuvieron durante todo el día de ayer en prácticamente todo el Cibao, sin embargo, la Defensa Civil en Santiago no tenía hasta anoche solicitudes de emergencias, por derrumbes o inundaciones.

Las constantes lluvias obligaron a residentes de barrios, urbanizaciones y comunidades campesinas a mantenerse en sus hogares.

Aunque la Oficina Nacional de Meteorología llamó a la población que reside en zonas bajas y en llanuras del valle del Cibao, Santiago y la costa norte, a mantenerse alerta, hasta anoche no había daños a la agricultura, ni a las personas.

Las constantes precipitaciones obedecen a un sistema frontal estacionado entre la costa norte del país y el Canal de los Vientos, de acuerdo al informe de la Oficina Nacional de Meteorología.

También se desarrolla sobre el país una vaguada en el Noreste que está contribuyendo con la humedad.

Las carreteras más afectadas por los aguaceros son las que comunican a Constanza con la autopista Duarte, la turística Luperón, que comunica a Santiago y Puerto Plata, por la cordillera septentrional y el tramo Santiago Rodríguez-Dajabón, en la localidad de Santiago de la Cruz.

De igual forma, decenas de comunidades ubicadas en las provincias de La Vega, Santiago, Puerto Plata y Espaillat confrontan dificultades por el deterioro de los caminos y vías de acceso.

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