Hoy 
Heinrich Hertz, un consagrado físico de origen alemán, descubrió en 1887 la existencia de las ondas de radio que hoy en su honor llevan el nombre de ondas hertzianas. Éste demostró que son ondas electromagnéticas que viajan por el espacio a la misma velocidad de la luz (300 mil kilómetros por segundo).
Según el libro Inventos y Descubrimientos más Famosos, en 1900, Marconi fundó la empresa Marconi Wireless Telegraph Co., con la ayuda de familiares ingleses, dedicándose a instalar equipos de radio para barcos, siendo el primero el Kaiser Wilhelm der Grosse, un trasatlántico alemán.
Hasta 1901 las transmisiones se realizaban entre puntos no muy distantes, hasta que la estación de Marconi en Cornwall (Inglaterra) transmitió en diciembre de ese año los tres puntos del código Morse que corresponden a la letra S. Esas señales fueron recibidas en Terranova, gracias a una antena elevada en el aire por una cometa.
Era la primera ocasión en que señales inalámbricas cruzaban el Océano Atlántico. A Guillermo Marconi se le atribuye la invención de la radio.
En Estados Unidos
Pasaron 33 años después del descubrimiento de las ondas hertzianas para que pudiera ser realidad el sistema de transmisión de sonidos que vino a vencer distancias y a cruzar fronteras para unir la humanidad.
Muchos autores coinciden en que la primera estación de radio fue captada en Pittsburg (Estados Unidos) el día 2 de noviembre de 1920.
A pocas cuadras de distancia un grupo de aficionados escuchó con auriculares al oído y con mucho ruido, los resultados de las elecciones presidenciales de esa nación por medio de la Westinghouse Electric Corporation.
En la conferencia Libertad y Responsabilidad de las Emisoras de Radio y TV, celebrada en la Universidad Northwestern de Chicago en 1961, una de las ponencias dio cuenta de que la primera licencia a una emisora de radio en Estados Unidos fue expedida en septiembre de 1921.
Las estaciones de radio se expandieron tan rápidamente por todo el territorio norteamericano, que para principios de 1922 se habían otorgado 382 permisos, y el 27 de diciembre de ese mismo año, el número había aumentado a 569.
PRIMERAS EMISORAS DOMINICANAS
La República Dominicana fue uno de los primeros países en incorporarse a la radiodifusión. Los primeros intentos de nuestro país por entrar al mundo de las transmisiones radiofónicas sucedieron entre 1916 y 1924 (durante la primera intervención norteamericana), con la instalación de equipos de radiotelegrafía.
De manera definitiva, en 1926 el ingeniero Frank Hatton, radioaficionado por excelencia, construyó un pequeño transmisor de Amplitud Modulada (AM).
A este se le atribuye la primera emisora de radio del país, donde transmitía partidos de pelota, música en vivo y noticias suministradas por el periódico Listín Diario.
El 8 de abril de 1928 el estado dominicano inauguró HIX, la primera estación oficial, a cuya ceremonia asistió el entonces presidente de la República, Horacio Vásquez, acompañado de su esposa Trina Moya de Vásquez.
Según escribió el fenecido don Homero León Díaz en la desaparecida revista El Locutor, del Círculo de Locutores, ese día salió al aire por primera vez el Himno Nacional.
A partir de entonces, comenzaron a instalarse emisoras de radio en Santiago y Santo Domingo, principalmente, como HIJK, de don Tuto Báez, en 1929; HI4D (La Voz de Quisqueya), en 1931, de José Santamaría, y HIT (El hit del aire), en 1931, propiedad de Antonio Sanabia Rojas.
En 1932 aparecen HIL (La Voz del Trópico) en Santo Domingo, de Joaquín Custalls, y HILS, en Puerto Plata, fundada por Generoso Sarnelly, la misma que más tarde fuera trasladada a Santiago de los Caballeros.
El 16 de agosto de 1935 sale al aire en Ciudad Trujillo, HIN (La Voz del Partido Dominicano), una emisora con las más modernos equipos de entonces y un transmisor de 750 vatios.
Debido a la proliferación de la radiodifusión en los años 30, el gobierno tuvo que regularizar a los que hablaban por los micrófonos y esa sí como el 18 de abril de 1938, se realizaron los primeros exámenes oficiales para locutores.
La meca de las emisoras de ese tiempo fue La Voz del Yuna, fundada en 1943 por el coronel José Arismendi Trujillo (Petán) en Bonao, hasta que el 18 de mayo de 1946 fue trasladada a la capital dominicana.
El 29 de marzo de 1947 se inició la construcción del Palacio Radiotelevisor que actualmente ocupa, y el 1 de enero de 1949 se le cambió el nombre por el de La Voz Dominicana, luego Radio Santo Domingo, Radiotelevisión Dominicana, y posteriormente Corporación Dominicana de radio y TV (CERTV).
