El superintendente de Salud y Riesgos Laborales, Bernardo Defilló, advirtió ayer que la Aseguradora de Riesgos de Salud Oriental (ARS-Oriental) podría ser clausurada y dejado sin efecto el proceso de su habilitación definitiva, si se comprueba que se habría beneficiado del cobro de dinero no autorizado a pensionados de diferentes instituciones del Estado.

Dijo que esa ARS no está habilitada para hacer cobros a pensionados, porque no ha completado el proceso que le permitiría accionar en el mercado.

Dispuso que técnicos de la SISALRIL investiguen si hay anomalías en los trabajos de la compañía y explicó que se interesó por el caso y acudió a la sede de ARS Oriental motivado por lo publicado en este diario.

Defilló manifestó que los pensionados forman parte del régimen contributivo y por tanto tienen derecho a escoger la ARS que consideren de lugar, pero advirtió que “ninguna entidad está autorizada a producir descuento de un usuario, sin su aprobación”.

De su lado, los responsables de ARS Oriental declararon que ellos no tienen nada que ver con los descuentos que ha hecho Finanzas a los pensionados, sino que eso es responsabilidad de las asociaciones de pensionados que se han afiliado a ellos y que solicitaron el descuento a nombre de sus miembros.

“Ese tipo de negocio se hace con la dirección (de las asociaciones de pensionados) y bajo contrato escrito”, explicó Rafael Santana, auditor y asesor de ARS Oriental. Ramiro de los Santos, gerente general de la empresa, dijo que la compañía sometió su expediente desde marzo de este año a la SILSARIL con el número 044, y que ya recibió una acreditación provisional para brindar servicios de salud, aunque todavía falta la habilitación.

Este periódico publicó ayer la denuncia de numerosos pensionados a quienes la Secretaría de Finanzas les estaba descontando dinero sin su consentimiento, para pagar un seguro médico del que ellos no sabían nada, representado por ARS Oriental.