Irrupción de Google provoca temores en la banca europea

Irrupción de Google  provoca temores en la banca europea

(FILES) This March 25, 2008 file photo shows the sign for Google headquarters in Mountain View, California. Among the losses Google sustained when intruders stole computer information in December was a company treasure: a password system, The New York Times reported April 20, 2010. "Ever since Google disclosed in January that Internet intruders had stolen information from its computers, the exact nature and extent of the theft has been a closely guarded company secret," the report said, citing an unnamed person with direct knowledge of the investigation. AFP photo / Ryan Anson

Las voces que temen la irrupción de los gigantes tecnológicos en el sector financiero tienen motivos para echarse a temblar ante el movimiento protagonizado por Google, ahora con permiso para operar como si fuera cualquier otra fintech en todo el Espacio Económico Europeo.
El gigante online acaba de conseguir su licencia para realizar determinados servicios bancarios en Lituania, país considerado como el más benévolo y ágil en ese tipo de trámites. Con esta autorización ya en su poder, la compañía estadounidense acaba de dar el primer paso para convertirse en un banco, con funciones limitadas respecto a las entidades tradicionales, pero con funciones muy relevantes en el sector. Así, en cuanto Google se proponga comercializar su nueva licencia de Fintech, estará en condiciones de procesar pagos, emitir dinero electrónico, efectuar transacciones de pago, remesas internacionales, así como realizar servicios de depósito y retiro de efectivo, además de transferencias de débito directo y crédito. Lo relevante del permiso es que Google no solo podrá operar como una fintech en el Estado báltico, sino también en todo el espacio comunitario. El mismo requisito que el de Google ya lo obtuvieron con anterioridad Facebook en Irlanda y Amazon en Luxemburgo, en ambos casos con alcance europeo.
Vista la facilidad del trámite, no parece complicado que a la misma lista se añadan otros colosos del sector, como podrían ser Apple o Samsung, entre otros. Los anteriores ya disponen de medios de pago a través de móvil y de otros dispositivos, con ofertas que están llamadas a multiplicar sus prestaciones en los próximos años.
Gracias a esta autorización se desprende que Google podrá enseñar los dientes a la banca tradicional, con las oportunidades que puede representar para los usuarios en cuanto a dinamización del sector. Pero además de las ventajas, la conversión de Google en banco también podría entrañar riesgos en cuanto a garantías o protección de los clientes si los reguladores no ponen coto de antemano.

Las futuras incursiones de Google en el negocio bancario, que prometen incrementarse con el tiempo, también abre la caja de Pandora para la banca tradicional ante la aparición de nuevas amenazas competitivas para el conjunto del sistema financiero ya establecido. El colosal poder de Google es uno de los activos inalcanzables para los bancos. También es abrumador el caudal de datos personales que la estadounidense atesora de los usuarios, y a cuya riqueza no podría aspirar sus competidores. Por todo lo anterior, el futuro Google Bank tiene todo a su favor para intimidar a los bancos más relevantes del mundo.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas