JERUSALÉN (AP) — Israel empezó el jueves a enviar refuerzos militares a su frontera con la Franja de Gaza, según fuentes de Defensa, planteando la posibilidad de una operación militar ampliada en el territorio palestino en respuesta a los crecientes ataques con cohetes.

El movimiento de tanques y fuerzas de artillería se produjo tras otra noche de intenso fuego de cohetes, incluyendo dos proyectiles que cayeron en sendas viviendas en la localidad fronteriza de Sderot.

La última gran operación militar en Gaza, un territorio controlado por el grupo armado Hamas, se produjo a finales de 2012.

Los ataques con cohetes se producen en un momento de gran tensión tras el secuestro y asesinato de tres jóvenes israelíes en Cisjordania.

Israel ha acusado a Hamas de ser responsable de las muertes, y detenido a cientos de miembros del grupo miliciano en Cisjordania dentro de una gran operación de búsqueda, en la operación más grande lanzada en Cisjordania en casi una década.

Mientras tanto, los palestinos han acusado a extremistas israelíes de secuestrar y asesinar a un adolescente en el este de Jerusalén en un ataque de venganza, y durante todo el miércoles se registraron choques entre la policía israelí y jóvenes que lanzaban piedras.

En las semanas que han pasado desde la desaparición de los jóvenes israelíes, los milicianos en Gaza han disparado decenas de cohetes a Israel, que ha respondido con ataques aéreos contra supuestos objetivos militares.

Dos milicianos palestinos murieron en un bombardeo la semana pasada, y una niña palestina murió por fuego de un cohete. No ha habido bajas graves en el lado israelí. Hamas tomó el control de Gaza en 2007 arrebatándoselo a las fuerzas del presidente palestino, Mahmud Abás, que cuenta con apoyo de occidente.

Abás formó hace poco un gobierno de unidad respaldado por Hamas que pretendía poner fin a siete años de diferencias, pero Hamas, que posee miles de cohetes, sigue controlando con mano firme el enclave costero. Israel amenazó a Hamas con tomar duras medidas en respuesta a la muerte de los tres adolescentes.

Hamas elogió su supuesto secuestro, pero negó toda responsabilidad. El jueves podían verse autobuses llevando tropas israelíes a la zona de la frontera con Gaza. Un oficial israelí describió el movimiento de tropas como “defensivo”, hablando bajo condición de anonimato debido a las normas militares.

En el este de Jerusalén, las tensiones seguían siendo altas, mientras la policía investigando la desaparición de Mohammed Abu Khdeir, que según su familia fue secuestrado el miércoles poco antes de que se encontrara un cuerpo carbonizado en un bosque de Jerusalén.

La familia acusa a los extremistas judíos de matarlo en venganza por la muerte de tres jóvenes israelíes, que desaparecieron el 12 de junio y cuyos cuerpos sin vida fueron encontrados en un campo en Cisjordania.

Cientos de jóvenes israelíes de derechas marcharon el martes por el centro de Jerusalén clamando venganza. El este de Jerusalén estaba tranquilo el jueves por la mañana, aunque la policía dijo mantener patrullas en la zona. Un cámara de Associated Press grabó pintadas en hebreo que decían “muerte a Israel” y “muerte a los judíos”.