ATENAS (AP).- El italiano Stefano Baldini se llevó ayer domingo la medalla olímpica de oro en el maratón, en una carrera en la que el brasileño Vanderlei de Lima fue tercero tras ser empujado fuera de la ruta por un individuo cuando estaba en primer lugar.

Baldoni ganó con un tiempo de 2 horas, 10 minutos, y 54 segundos, el estadounidense Mebrahtom Keflezighi entró delante del brasileño para llevarse la presea de plata.

Cuando faltaban menos de 5 kilómetros para la meta, el individuo vestido con una falda y ropa multicolores salió sorpresivamente de entre la multitud y empujó al brasileño de Lima, sacándolo de la ruta y lanzándolo entre el público.

El hombre fue rápidamente controlado por la policía, y de Lima reanudó la carrera en primer lugar, pero pronto fue sobrepasado. La policía informó que el intruso les dijo que era un irlandés.

De Lima declaró que temió por su vida y que el accidente probablemente le costó la medalla de oro porque «perdí mi concentración».

Brasil presentó una protesta y pidió que se le diese a de Lima un duplicado de la medalla de oro, pero la federación internacional de atletismo rechazó la solicitud.

El comité olímpico brasileño dijo en su portal de internet que llevará el caso al Tribunal Internacional de Arbitraje Deportivo.

De Lima fue ovacionado por los espectadores en el estadio Panatinaiko, la hermosa estructura de mármol donde se efectuaron los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna hace 108 años.

Keflezighi, que emigró a Estados Unidos desde Eritrea a los 10 años, es el primer estadounidense que gana una medalla olímpica en el maratón desde que lo hizo Frank Shorter en 1976.

El italiano Baldini, de 33 años, saludó alzando los brazos al concretar su triunfo y luego cayó de rodilla extenuado. Baldini ha ganado dos veces plata en maratón en torneos mundiales y fue campeón de Europa.

Lima había tomado la delantera alrededor de la mitad de la prueba, transcurridos unos 20 kilómetros.

De Lima, bicampeón panamericano, fue aumentando la ventaja hasta extenderla a 46 segundos, pero pronto comenzó a ceder terreno, y cuando se produjo el incidente ya parecía evidente su cansancio e inevitable que fuera sobrepasado por Baldini.

El maratón se corrió en la misma ruta que le dio su nombre a la carrera, un trayecto difícil con subidas empinadas. Es la ruta que, según la historia, corrió Filipídes en el 490 antes de Cristo para llevar la noticia de que Grecia había derrotado a los persas en la batalla de Maratón.

«­Alegraos, hemos ganado!», dijo Filipides tras la larga carrera, y enseguida cayó muerto.