J. C. Valentín refuta temores y augurios del juez Subero Isa

<P>J. C. Valentín refuta temores y augurios del juez Subero Isa</P>

La posible creación de una Sala Constitucional independiente de la Suprema Corte de Justicia continúa enfrentando sectores. El magistrado Jorge Subero Isa, presidente de la SCJ, reiteró que si esta Sala es creada en el país habría un caos institucional y esta vez añadió que en poco tiempo todos “lloraríamos lágrimas de sangre”. Ayer mismo, el vicepresidente de la Asamblea Revisora le salió al frente al magistrado Subero Isa y afirmó que no conoce democracia alguna donde eso haya ocurrido.

El presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Valentín, refutó  las declaraciones del presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, de que el país podría “llorar lágrimas de sangre”, si se incluye la creación de una Sala Constitucional durante la segunda lectura  de la reforma constitucional.

“Si la creación de un tribunal constitucional no ha significado lágrimas de sangre para otras democracias de Iberoamérica y países europeos que tienen algún diseño de tribunales constitucionales, no sé porqué  para nosotros sería una amenaza a la institucionalidad que podría hacer que el país llore lágrimas de sangre”, enfatizó. Aclaró que no  está defendiendo  ninguno de los modelos, ni el existente ni el propuesto,  “porque creo que sería la discusión de la asamblea revisora la que oriente el camino más avanzado y que más convenga”.

Afirmó que sectores muy fuertes  están  contra  la propuesta de Subero Isa, entre los que citó medios de comunicación y organizaciones de la sociedad civil. “Satisfacer a todos los sectores en un diseño constitucional es bastante difícil. Serían la sensatez y el buen sentido común los que orientarán  la dirección más razonable y que más fortalece la democracia”.  Valentín fuer consultado tras recibir a una delegación del Parlamento Latinoamericano.

Subero dijo que quiere que lo recuerden  por haber advertido que la creación de una Sala Constitucional independiente  crearía un caos y una inseguridad jurídica tan grande  “que ha poco tiempo todos sin excepción,  lloraríamos lágrimas de sangre”.

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