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LOS ANGELES (EEUU) (EFE).- La súper estrella del pop Michael Jackson responderá ante la justicia de nueve cargos de abuso de menores ocurridos entre febrero y marzo del 2003, según informó ayer Tom Sneddon, fiscal del caso.
Sneddon rompió la intriga tras un mes de especulaciones en torno a un caso que comenzó el 20 de noviembre con el arresto del artista, que depositó tres millones de dólares para obtener la libertad condicional. [tend]
Siete de estos cargos -que conllevan entre tres y ocho años de cárcel cada uno- se refieren a actos lascivos con menores, y otros dos a la administración de alcohol a un menor con el propósito de abusar de él.
El abogado del artista, Mark Geragos, declaró hoy, tras conocer los cargos, que «ninguna de estas horribles acusaciones son ciertas» y señaló que el cantante luchará «con toda su alma» para demostrar su inocencia y «de ninguna manera la Fiscalía prevalecerá en este caso».
Los presuntos delitos se cometieron entre el 7 de febrero y el 10 de marzo, según Sneddon, una ambig~edad que sorprendió a expertos legales que con anterioridad ya habían criticado los procedimientos del fiscal para investigar un caso que consideran débil.
Sneddon defendió la validez de las pruebas de que dispone su oficina para acusar al artista, saliendo al paso de las críticas de que todo es un montaje de publicidad.
El fiscal dijo ante un batallón de periodistas que se agolpaban a la puerta del juzgado de Santa María, localidad cercana a Santa Bárbara, que la supuesta víctima está dispuesta a testificar.
Indicó, sin dar más detalles, que la demanda incluye «alegaciones especiales» que podrían impedir que Jackson obtenga la libertad condicional.
Además, el fiscal confirmó el retraso en la fecha en la que el cantante tiene que comparecer judicialmente por primera vez para hacer frente a los cargos.
Esta fecha se ha retrasado del 9 al 16 de enero por motivos administrativos y para acomodar a los medios de comunicación, dijo Sneddon.
La víctima no fue nombrada por Sneddon, pero informaciones filtradas en las últimas semanas indican que se trata de un joven que hoy tiene 14 años, afectado por un cáncer, y entrevistado en un documental producido en el Reino Unido a principios de año.
En este documental, el joven daba a entender que era uno de los mejores amigos del intérprete y llegaba a compartir su dormitorio.
El artista no estuvo presente mientras las autoridades leían los cargos contra él, ya que no lo requiere la ley, pero su portavoz Stuart Backerman informó que volverá a su rancho «Neverland» este sábado, cuando sus amigos y familiares planean reunirse para manifestar su apoyo.
Posteriormente, Jackson planea viajar al Reino Unido de vacaciones, dijo Backerman, gracias a que sus abogados consiguieron que le devolvieran su pasaporte, confiscado en el momento de su arresto.
«Se va para relajarse y cambiar de ambiente», dijo Backerman.
La acusación formal contra Jackson llega el mismo día en el que surgen nuevas revelaciones que abundan en su fama de estrambótico.
Según el diario «The New York Post» el cantante se convirtió en la noche del miércoles al jueves oficialmente al Islam, y es ahora miembro de la controvertida organización «Nation of Islam» dirigida por Louis Farrakhan.
El cantante ha mantenido su inocencia, y a través de su abogado ha denunciado que se le acusa por motivos económicos.
Documentos difundidos hace dos semanas mostraban que tanto el niño como su hermano y la madre habían asegurado con anterioridad que no se había producido abuso sexual alguno.
De acuerdo con estos documentos, el joven aseguró en su momento a los investigadores que nunca había compartido la cama con Jackson, al que sólo se refirió como el «artista».
La madre del menor corroboró esta declaración y aseguró que los medios de comunicación habían sacado de contexto las declaraciones hechas en el documental británico.
