Seis hombres y dos mujeres que la Armada Dominicana logro salvar con vida al zozobrar la embarcación en la que se dirigían ilegalmente a Puerto Rico por la zona de Juanillo, provincia La Altagracia, narraron que ya ellos se habían despedidos de este mundo, antes de llegar el guardacostas que lo rescato.

«Jamás, pero jamás por más calamidades que esté pasando en mi país, volvería a embarcarme a una aventura de esa naturaleza, y pido a mis compatriotas que tampoco lo hagan’’, fueron las primeras palabras de Maireny Javier, de apenas l9 anos de edad y Santa Báez Santana, de 31.

La primera es nativa del municipio de Nagua y la segunda de la provincia Peravia, Bani, admitiendo ambas que se dejaron conquistar de personas que trafican ilegales a Puerto Rico.

«Tanto nosotras como los seis hombres que también iban en la yola, nos encomendamos a Dios y abrimos los brazos mirando hacia el cielo, cuando llego el guardacostas de la Armada Dominicana que nos rescató a todos con vida’’, narraron las dos damas. El rescate ocurrió el viernes pasado.

Sin embargo, tanto Maireny Javier como Santa Báez Santana, rehusaron decir a los agentes de la Dirección de Inteligencia Naval M-2, donde fueron trasladadas junto a los seis hombres, la cantidad de dinero que pagaron por el frustrado viaje.

«Lo importante es que gracias a Dios y a ustedes, nosotros estamos vivos y jamás volveremos a una aventura de esa naturaleza», dijeron ambas frustradas viajeras quienes fueron entregadas a sus familiares por órdenes del vicealmirante Ramón Gustavo Betances Hernández.

Los hombres también

También los seis hombres que junto a las dos mujeres se vieron en peligro de perecer ahogados al zozobrar la, dijeron que solo pensaban que morirían y dejarían sus familias.

«Nosotros decíamos, mantengámonos unidos que Dios hará un milagro y nos mandara a sacar de esa yola que rápidamente se hunde’’, expresiones de Arismendy Betances Sánchez Genny Mora Pérez y Claudio Polanco, tres de los seis hombres rescatados.

Los demás fueron Luis Sandro Burgos, Edwin Méndez García y Welvis Andrés Reyes. Los seis hombres son nativos de Villa Riva, San Francisco de Macorís, Azua y Bani, respectivamente, según las documentaciones presentadas a los agentes de inteligencia naval M-2.

Los sobrevivientes manifestaron que si no hubiera sido por la rápida intervención de la Armada Dominicana, iban a morir ahogados, porque desde que salieron de la zona Juanillo y entraron al mar, la embarcación comenzó a confrontar fallas.

En lo que va de año, la Armada, ha frustrado más de l25 viajes ilegales a Puerto Rico, arrestando a más de mil personas, e incautando decenas de embarcaciones, muchas de ellas incineradas en los mismos lugares de captura.

Las personas además de arriesgar sus vidas en el mar, pierden el dinero que invierten en los frustrados viajeros, y corren asimismo el peligro de contaminarse con el coronavirus que tanto afecta a República Dominicana como a Puerto Rico y al mundo.