Jamón serrano, más allá de un simple acompañante en su cocina

Jamón serrano, más allá de un simple acompañante en su cocina

Las bondades que ofrece el jamón serrano pasan más allá de comerlo con huevos fritos, pan y tomates.

Además de sus propiedades nutritivas como su alto contenido  en  hierro, zinc, calcio, fósforo, magnesio, vitamina B1, vitamina B2, vitamina B3, vitamina B6 y vitaminas del grupo D, puede ser aprovechado para preparar verdaderas delicias culinarias.

Desde suculentas recetas, que pueden ser el plato principal en la mesa, hecho a base de jamón serrano, hasta diversas opciones para entradas, o bocadillos para una reunión improvisada.   

Pero lo que pocas personas saben es que además  de consumirse en alimentos sólidos, puede elaborarse también un delicioso caldo con su hueso.

Caldo de hueso de jamón serrano.   Es una opción para los amantes de las sopas.  Para su elaboración, no se necesita ser un experto. La facilidad de su preparación  no se compara con el delicioso resultado. 

Se pone a cocer el hueso de jamón en agua sin añadir ningún otro condimento, pero si gusta puede agregar un toquecito de sal. 

De esa manera es posible obtener  un caldo con alto sabor a jamón, para tomarlo solo, con algunas rodajas de pan, o ser utilizado para elaborar una   sopa,  arroz,  diferentes salsas. La única diferencia es que será un caldo de jamón totalmente natural.

Para los gustos, los colores.     En su defecto, si es de los que no les gusta preparar caldos sin verduras y vegetales, puede hacerlo de igual forma, a diferencia de que se le agregará zanahoria, ajo, puerro, pimienta, cebolla. Lo que prefiera. El sabor variaría, pero el gusto del jamón sería inconfundible. 

Recetas

Croquetas de jamón serrano

100 grs. de mantequilla

100 grs. de harina

200 grs. de jamón serrano

1 cebolla

1 diente de ajo

1 litro de leche

1 rama de perejil (para decorar)

Para  freír:

 Harina

3 huevos batidos

Pan rallado

Aceite virgen extra Hojiblanca

Preparación: Ponga en una cazuela a calentar la mantequilla cortada en dados. Mientras tanto pique la cebolla y el  ajo. Cuando se funda la mantequilla ponga la cebolla y el ajo a sofreír, incorpore el jamón picado y rehogue brevemente. Añada la harina y mezcle bien, vierta la leche poco a poco, sin dejar de remover. Trabaje la masa durante 20 minutos aproximadamente. Espolvoree con perejil picado y extienda la masa en una fuente. Unte la superficie con un poco de mantequilla para que no se haga costra y déjale enfriar. Cuando la masa este fría, corte y moldee las croquetas. Enharine, pase por huevo y pan rallado y fríalas en aceite bien caliente. Cuando estén hechas, retírelas de la sartén y escurra el exceso de aceite sobre un plato cubierto con papel absorbente de cocina. Sirva las croquetas y adórnelas con unas ramitas de perejil.

Lentejas con tomate y jamón serrano

2 tazas de lentejas

2 ajo en granos o molido

1 cebollas.

1 pimentón rojo

Perejil

Aceite de oliva (para sofreir).

2 tomates maduro rayado (sin piel ni semillas)

Trozos de jamón serrano 

Azafrán en hebras o molido

Sal y pimienta al gusto

Preparación.   Remoje las lentejas por lo menos 30 minutos en agua. Luego lávelas muy bien y móntelas a hervir con el jamón serrano unos 15 minutos. Pele y raye los tomates. Y corte el pimentón y la cebolla en cuadritos. En una sartén agregue una cucharada de aceite de oliva y sofría los ajos cortados en cuadritos o machacados. Agregue la cebolla y el pimentón, déjelos marchitar. Agregue el tomate y el azafrán, sofría. Agregue sal y pimienta al gusto. Agregue todo esto en las lentejas y deje cocer por 15 minutos más. Y ¡disfrute!

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