Tokio.– El Gobierno japonés confirmó hoy que siete japoneses, dos mujeres y cinco hombres, fallecieron en el ataque perpetrado el viernes en un restaurante en Dacca, en el que perdieron la vida al menos 28 personas.
Las víctimas fueron identificadas a través de fotografías y pertenencias aunque sus nombres no han sido revelados por respeto a las familias, reveló el ministro portavoz del Gobierno, Yoshihide Suga, en una rueda de prensa recogida por la agencia Kyodo.
Suga afirmó que la confirmación fue “extremadamente dolorosa” e informó de que el Ejecutivo nipón se prepara para enviar un avión a Bangladesh en breve, posiblemente el domingo.
Las fuerzas de seguridad de Bangladesh rescataron hoy a trece de los rehenes retenidos durante horas en el local, entre ellos un japonés que se encontraba cenando en el restaurante con los siete fallecidos cuando un grupo de yihadistas armados entró en el establecimiento.
Tamaoki Watanabe, un empleado de la firma nipona Almec Corporation, resultó herido y está siendo tratado en un hospital por herida de bala, aunque no se teme por su vida.
Los ocho japoneses trabajaban en distintas empresas involucradas en un proyecto de desarrollo en Bangladesh liderado por la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA). “Me siendo profundamente indignado porque personas que trabajan para diseñar el desarrollo de Bangladesh se hayan visto involucradas en esto”, declaró el presidente de la JICA, Shinichi Kitaoka, en otra comparecencia ante los medios.
El primer ministro nipón, Shinzo Abe, condenó hoy el ataque y se mostró “profundamente indignado” por el número de víctimas que se ha cobrado el incidente, que calificó como un “acto de terrorismo salvaje y atroz”, según declaraciones recogidas por Kyodo.
Por su parte, el ministro de Exteriores, Fumio Kishida, y su homólogo bangladesí, Mahmood Ali, afirmaron en una conversación telefónica que ambos países coordinarán sus respuestas a la crisis.
Según las cifras oficiales confirmadas hasta el momento, el ataque, que ha sido reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico y la rama de Al Qaeda en el subcontinente indio, se ha cobrado la vida de al menos 28 personas- 20 rehenes, dos policías y seis de los siete asaltantes.
Al grito de “Allahu Akbar (Alá es grande)”, varios insurgentes con armas de fuego, artefactos explosivos y cuchillos irrumpieron a última hora del viernes en un local frecuentado por extranjeros, ubicado en el acomodado barrio bangladesí de Gulshan, que alberga embajadas y oficinas de compañías multinacionales.