La recuperación del verdor de la ciudad de Santo Domingo y propagar la siembra de plantas endémicas y criollas en distintas zonas del país son algunos de los planes que tiene el Jardín Botánico Nacional Doctor Rafael María Mocoso para este 2020, según explicó ayer Ricardo Guarionex García, director de la entidad.
“Hoy el tema del verde urbano es fundamental y prácticamente en todos los países se está trabajando para mejorar el arbolado en las ciudades y la República Dominicana, específicamente en la ciudad de Santo Domingo no escapa a esa realidad, que nosotros tenemos prevista”, dijo Ricardo García.
Explicó que en los últimos años en el Gran Santo Domingo debido al acelerado crecimiento vertical de la ciudad, los espacios donde existían casas independientes con gran patio, ahora se han construido torres.
“En lugares como Naco, Piantini, Arroyo Hondo, Gascue, los árboles de esas casas han sido eliminados y se han colocado columnas de concreto y hemos perdido el verdor”, expresó García, quien se mostró esperanzado a que la educación de los dominicanos mantenga el respeto por las áreas verdes que quedan.
Otro de los planes en carpeta es lo que denominaron “Misión rescate”, que consiste en atender las especies que están en peligro de extinción y que se busca estudiar, multiplicar y sembrarlas con ayuda del empresariado nacional.
“Este año también nos vamos a enfocar mucho en las especies que tienen valor forestal, apoyando proyectos agroforestales como los que desarrolla el Gobierno en la región Sur, con nuestro banco de semillas”, agregó el director, quien explicó que aunque son para reforestar también tienen un aprovechamiento forestal futuro.
Más árboles frutales. A propósito de la declaración del 2020, como el año de Consolidación de la Seguridad Alimentaria, desde el Jardín Botánico Nacional se dará impulso a la propagación de especies frutales. “Hay muchos de los árboles frutales que la gente no conoce, porque han bajado su población entonces vamos a tratar de divulgar información y que la gente ponga interés en sembrarlos”, expresó.
Entre las especies frutales que el Jardín Botánico busca propagar están el mamón, el anón y el mamey. Pero además otros que son exóticos y que pertenecen a la variedad de cítricos, como el limón dulce, la jagua y la naranja agria, que han sido diezmadas por algunas plagas en el país.
Petición a los tour operadores. Ricardo García hizo un llamado a las empresas que manejan los viajes de los visitantes al país, que incluyan con más énfasis al Jardín Botánico Nacional entre los atractivos del turismo ecológico, a fin de que pueda explotar más este atractivo que ocupa un área aproximada de dos millones de metros cuadrados en el centro de la ciudad.
El proyecto de la Vieja Barquita. Lo calificó como una de los logros de su gestión, pues el arbolado y la vegetación en toda la rivera del río Ozama e Isabelita, marcha muy bien.
“Recuperar ese verde en la margen de los ríos se ha logrado con la siembra de miles de árboles”, dijo.