El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Julio César Castaños Guzmán, aseguró ayer que las dificultades presentadas con los escáneres en las elecciones de 2016 en ‘ningún sentido afecta la legitimidad de los resultados’.
Castaños Guzmán justificó su afirmación al indicar que el organismo comicial decidió diez días antes de las votaciones que el conteo también fuera manual.
Dijo que el resultado electoral es la consecuencia de sumar el contenido de actas físicas y que querer controvertirlos ahora le parece improcedente.
Afirmó que no se puede asociar un desperfecto informático de un escrutinio automatizado, que al final no fue el determinante, sino que los resultados fueron dados luego de tener el resultado manual.
“Pensar que porque nuestra Dirección de Informática esté cuestionando estos equipos, de alguna manera deslegitima las elecciones, no obedece a la verdad”, expresó el funcionario en una comunicación enviada por la JCE.
Al referirse al contrato de la entidad con la empresa que vendió los equipos, dijo que el pleno del organismo está a la espera del informe final de la investigación de la Cámara de Cuentas, para luego de escuchar el parecer de su departamento jurídico y de los partidos políticos, tomar una decisión al respecto.
Indicó que el problema de esos escáneres no es solo económico, ya que aún se deben, sino que tienen en su inventario más de 49 mil equipos que no se pueden usar. Aseguró que no se trata de confrontar personas y que tampoco está formulando acusaciones contra nadie, pero que actuarán de forma institucional.
Agregó que lo que tenga que ver con ese asunto será informado a través en su página de Internet.