Puerto Príncipe, (EFE).- El jefe de la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah), Mariano Fernández, reafirmó hoy su indignación por la supuesta violación de un joven haitiano por parte de cinco marinos uruguayos de la fuerza de paz y calificó estos actos como «inexcusables». «Estamos profundamente indignados» por estos hechos, subrayó el chileno en una carta enviada a los medios de prensa.

No obstante, «los actos de unos pocos no deben empañar también los de millares de personal militar, policial y civil que sirven a la Minustah y a Haití de manera impecable desde el año 2004», dijo.

Fernández aseguró que la Misión tomó «decisiones drásticas» tan pronto él fue informado de la supuesta violación del joven haitiano en la región de Port-Salut (sur del país). Así destacó la apertura de una investigación preliminar para recabar elementos y las pruebas relacionadas con este incidente, y el confinamiento de los soldados involucrados en sus cuarteles, «para evitar que tuvieran alguna influencia en el desarrollo de la investigación».

 Según un informe de la Red Nacional de Defensa de Derechos Humanos (RNDDH) de Haití, la presunta violación ocurrió a finales de julio. La agresión, grabada por uno de los cinco soldados con un teléfono móvil y difundida parcialmente a través de internet, motivó la condena del presidente de Haití, Michel Martelly, y reacciones de rechazo a la Minustah en sectores políticos locales.

Al menos una persona resultó herida y dos tiendas de campaña incendiadas durante las violentas protestas realizadas este miércoles en la capital de Haití por centenares de personas que reclaman la salida del país de la Minustah. Fernández destacó hoy la carta «humilde y digna» que el presidente de Uruguay, José Mujica, envió a su homólogo haitiano, en la que pidió perdón por lo ocurrido.

El diplomático chileno aseguró que la Minustah, junto a Uruguay, da seguimiento a lo acontecimiento «para asegurarse, si fuera necesario, que los soldados son llevados ante la justicia y las sanciones apropiadas sean impuestas». Las Naciones Unidas, agregó, «tienen igualmente una estrategia de apoyo a las víctimas de explotación y abusos sexuales, la cual pensamos poner en práctica».

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, envió ayer a Haití a una delegación de asesores para apoyar las medidas aplicadas por la Misión tras la supuesta agresión sexual, informó a la prensa su portavoz, Martin Nesirky.

El equipo, liderado por el jefe del Departamento de Apoyo Logístico de la ONU, Anthony Banbury, se reunirá con los responsables de fuerza de país y con representantes del Gobierno haitiano para reiterarles «la seriedad con la que la ONU y el secretario general se toman las acusaciones de mala conducta o abusos sexuales» hechas a los integrantes de sus misiones.

Los responsables de la Minustah autorizaron el martes la repatriación de los militares uruguayos implicados en el caso para que sean sometidos a la justicia en su país. Además, el Gobierno de Uruguay envió a Haití al titular del Sistema Nacional de Apoyo a las Operaciones de Paz (Sinomapa), José María Burone, para dirigir la investigación que realiza el Ministerio de Defensa uruguayo sobre la supuesta violación. EFE