Hoy 
POR DIEGO PESQUEIRA
El jefe de la Policía Nacional, mayor general Bernardo Santana Páez, afirmó ayer que durante su gestión el promedio de delincuentes muertos al enfrentar a policías que tratan de detenerlos por la comisión de crímenes y delitos, se redujo de 35 en gestiones pasadas a 17 al mes en la actualidad.
«Desde que llegué a la jefatura de la Policía implementé un mecanismo que permitiera bajar el índice de personas que perdían la vida en lo que la sociedad define como intercambios de disparos», precisó.
A juicio de Santana Páez, la reducción de muertes violentas a manos de policías es fruto del trabajo educativo sobre diversos aspectos de los derechos humanos.
«Se están cumpliendo las instrucciones que el jefe de la Policía está dando, quien se reúne con los jefes de direcciones y departamentos tomen las acciones de lugar para prevenir abuso policial», precisó Santana Páez.
«De 35 muertes sindicadas como intercambios de disparos nosotros la hemos bajado a 17 por mes y seguiremos bajando», señaló.
Dijo que un aspecto significativo que refleja la voluntad de la jefatura de la Policía para prevenir cualquier infracción a la ley o violación a las derechos humanos, es que cuando se registra un intercambio de disparos de inmediato se envía un oficio a la Procuraduría General de la República solicitando la designación de un abogado ayudante para investigar si hizo un uso legal de la fuerza para reprimir o prevenir una agresión. Al hablar a los medios de comunicación, previo a depositar una ofenda floral en el Altar de la Patria, en ocasión de la celebración del Día Mundial de los Derechos Humanos, Santana Páez destacó la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos haya reconocido que se ha experimentado un ligero avance en cuanto a los métodos de actuación policial con los ciudadanos. Estimó que haber modificado los currículo de las escuelas y academias de la Policía para introducir temas sobre respeto a los derechos humanos empezó a dar sus frutos.
«Ahora hay que enseñarle a los policías todo lo relacionado con los derechos humanos», agregó.
Reconoció el trabajo realizado por el ex jefe policial, mayor general Manuel de Jesús Pérez Sánchez, en favor de la capacitación de los policías en materia de protección a los derechos humanos.
Entiende que cada policía debe respetar de manera estricta los derechos individuales de los ciudadanos, pero que de esa misma manera deben ser espetadas las autoridades.
Lamentó que en lo que va de año a más de 18 policías se le ha violado su derecho principal «el derecho a la vida», en el ejercicio de sus funciones policiales.
Destacó que en la actualidad se desarrolla un intenso programa de educación y promoción de los derechos humanos y deberes del ciudadano en 12 barrios en los que se implementará el Plan de Seguridad Democrática.
ROJAS NINA
En tanto que Porfirio Rojas Nina, alto comisionado de los Derechos Humanos, aseguró que en el país se han experimentado avances significativos en las actuaciones policiales en materia de respeto a los derechos humanos.
«Las actuales autoridades policiales ponen empeño en que se respeten los derechos humanos», precisó.
VIRGILIO ALMANZAR
Mientras que Virgilio Almánzar reconoció que el general Santana Páez atiende con prontitud las denuncias de maltratos a ciudadanos, resaltando que en algunos casos ha investigado de manera personal situaciones de violación a los derechos humanos.
