Por CARLOS NINA GóMEZ
¿Qué imperará, respecto a Joan Guzmán, en el histórico combate que el próximo lunes -en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto- será montado en disputa por el título mundial del peso ligero júnior?.

Guzmán, invicto en 26 peleas profesionales (17 victorias por nocaut), es quien debe responder la pregunta, según el criterio de especialistas.

Pero la interrogante es dirigida, también, a los expertos…y precisamente un grupo de analistas, a propósito del esperado match de puños enguantados que el quisqueyano protagonizará con el estaodunidense Antonio Davis, da diferentes respuestas a la pregunta.

Los más avesados dicen que Guzmán, quien pone en riesgo su corona de las 130 libras, avalada por la Organización Mundial de Boxeo (OMB), debe trabajar, desde el mismo instante que dé inicio a la reyerta, con «sumo cuidado».

No actuar, aprecisan, de manera apresurada y nunca creer que en Antonio Davis va a tener de frente a una «presa fácil». ¡Ni tampoco llenarse de motivación patriótica por el hecho de que vaya a exhibir su calidad ante su público que se agolpará en la Media Naranja del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte!.

Aunque, dicen los analistas, el monarca criollo es el claro favorito, debe trabajar en función de lo que es el aspecto técnico y saber, además, que el boxeo es el arte de dar golpes y no recibir golpes.

Guzmán, a su llegada al país la noche del pasado miércoles, proclamó que va a terminar rápido la pelea…y que dejará sentir sus duras manos que deben ir directamente al cuerpo de Davis.

Sin embargo, los más objetivos analistas exponen que Guzmán, quien es un peleador que pega fuerte con las dos manos, no debe apresurarse a buscar el nocaut…su pelea debe hacer basándose en lo que es el fundamento del boxeo. Y el fundamento del boxeo, agregan, es el dominio de los elementos técnicos.

Traen a colación el criterio expuesto por el ex boxeador dominicano Inocencio «Mao» de la Rosa -y quien en la actualidad trabaja como entrenador en un gimansio de Las Vegas, estado de Nevada, EE.UU.- en el sentido de que «Joan Guzmán no es un peleador-noqueador…él es un boxeador, un hombre que domina la técnica. Es realmente un técnico del boxeo».

Si se evalúa la opinión de Mao ode la Rosa se debe llegar a esta conclusión: Que Joan Guzmán, como miembro de la escuela técnica, no tiene que subir al ring pensando en el nocaut…debe, insisten los analistas, trabajar en función de su estelaridad técnica y saber que un buen boxeador, siempre, es aquel que gana sus combates de las dos principales maneras: Por los golpes que coloca aplicando el buen arte del boxeo, o por el clásico nocaut.

El entrenador Don House y la estrategia para el pleito

Don House, un ex boxeador profesional, es el entrenador de Guzmán y tiene bien claro cuál es la estrategia que empleará en el combate de su pupilo el venidero lunes.

House, estadounidense, es un hombre circusnpecto al hablar. Cuando los periodistas lo consultan se limita a contestar las preguntas con sencillas respuestas. A veces casi en monosílabos.

No obstante, cuando se refiere al campeón ligero júnior de la OMB dice que es un gran atleta, disciplinado y consciente de lo que debe hacer en el cuadrilátero.

Por razones obvias, House no revela el estilo con el que Guzmán accionará en el pleito con Davis.

Pero coincide con lo señalado por expertos locales de que no tiene que «agitar» sus puños para salir airoso por la vía del sueño.

Tony Rivera, también miembro del equipo técnico del gladiador quisqueyano, expresa que no tiene duda de que Guzmán ava a triunfar en su compromiso del lunes.

Sin embargo, también señala que nunca deberá menospreciar a su rival y agrega que el propio Joan ha dicho que no va a subestimar a Davis.

Ayer Guzmán realizó sesiones de entrenamientos en un gimnasio especial de Santo Domingo instalado en para tales fines…también fue el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto donde hizo especie de exhibición para la prensa local.  Se le vio bien físicamente, con rapidez de manos y piernas y lleno de confianza, pero reiteró que «no voy a creerme que mi rival es una papita. Voy a subir al ring a trabajar duro, como siempre lo hago».

A toda la distancia

Guzmán y Davis van a contender a la distancia de 12 asaltos por tratarse de una pelea en el que se pondrá en juego una corona del mundo.

Se sabe que el criollo es dueño de una potente pegada con la cual ha devastado a 17 rivales en sus 26 subidas al cuadrilátero.

Sin embargo, en sus últimas cuatro peleas Joan no ha noqueado. Sus triunfos se han decidido por las cartulinas de los jueces.

El peleador criollo, en mayo del 2005, tuvo su primer combate en la división ligero júnior y su rival fue el mexicano Javier Jáuregui, un ex campeón mundial del peso ligero.  A Jáuregui lo derrotó de manera cómoda. Fue una victoria por amplia decisión en diez rounds.

Lo propio había hecho en defensa de su antiguo título (el del peso supergallo) ante otro mexicano, Fernando Beltrán. A Beltrán también lo venció por decisión unánime para revalidar su cetro de las 122 libras.

Con sólo un combate en los ligeros juniors, Guzmán aceptó el reto de ir a una pelea por la corona mundial de esa división que estaba en poder del argentino Jorge Rodrigo Barrios.

Los expertos exponen: La historia es conocida, pues Guzmán, en 12 violentos asaltos, derrotó a Rodrgio Barrios y se alzó con la victoria y el título de las 130 libras versión OMB.

Ante un bravo peleador, como lo es el argentino destronado, Guzmán ofreció una exhibición de boxeo técnico y nunca se creyó que ganaría por nocaut.

Con su boxeo técnico el hoy flamante monarca mundial de las 130 libras volvió a bajar del cuadrilátero triunfante…¡y no por nocaut!.