CANONSBURG, EEUU (AFP).- Bajo la presión de encuestas desfavorables, el candidato presidencial demócrata John Kerry recibió este fin de semana consejos sobre la campaña, del ex mandatario estadounidense Bill Clinton, quien este lunes se sometió a una operaración cardiaca.

   «En la noche del viernes, Kerry lo llamó para desearle suerte. Decidieron hablar nuevamente el sábado por la noche. Tuvieron una buena conversación. Hablaron de la campaña», precisó la portavoz Allison Dobson.

   Según el cotidiano The New York Times, la conversación entre Clinton y Kerry se prolongó durante 90 minutos. El ex presidente dio consejos al candidato demócrata sobre cómo dar un nuevo impulso a su campaña, en momentos en que recientes sondeos indican que Bush le saca ventaja.

   El cotidiano, que cita fuentes al tanto de la conversación, señala que Clinton habría aconsejado a Kerry no hablar más de su experiencia en Vietnam y atacar a Bush sobre su política en relación al empleo y los beneficios de salud.

   Durante el mes de agosto Kerry fue blanco de ataques por parte de un grupo de veteranos republicanos, que cuestionan los actos de valor del senador de Massachusetts durante su servicio en Vietnam, por los que fue varias veces condecorado.

   Durante la convención republicana realizada la semana pasada en Nueva York, el vicepresidente Dick Cheney puso en duda la capacidad de Kerry para garantizar la seguridad de Estados Unidos ante la amenaza terrorista.

   La prensa estadounidense se hizo eco de la preocupación de dirigentes demócratas que juzgan que la campaña de Kerry carece de la agresividad necesaria para responder a esos ataques.

   Un nuevo consejero, John Sasso, que trabaja en el Partido Demócrata, reforzará la campaña de Kerry, agregó Dobson.

   Otros altos funcionarios de la administración Clinton ya se habían unido a la campaña de Kerry, como Paul Begala, Doug Sosnik, Stanley Greenberg, James Carville, a fin de darle un nuevo impulso, precisó el diario. La semana pasada, el ex portavoz de Clinton, Joe Lockhart, fue llamado a reforzar el equipo demócrata.

   Durante la Convención Demócrata en Boston, en julio pasado, el discurso de Clinton ante los delegados mostró que el ex presidente no había perdido su talento de comunicador. Su papel en la campaña de Kerry no fue todavía claramente definido, aunque la presencia en ella de numerosos colaboradores suyos muestra una influencia creciente.

   Sin embargo la intervención quirúrgica y su posterior convalescencia le impedirán desempeñar un rol muy activo durante al menos un mes.

   Kerry se encontraba en la mañana del lunes en Canonsburg (Pensilvania), tras pasar la jornada del domingo en la residencia familiar de su esposa Teresa, cerca de Pittsburgh, en el mismo Estado. Luego continuará la jornada en Racine (Virginia Occidental, este), Cleveland (Ohio, norte) antes de volar a Greensboro (Carolina del Norte, sureste) donde pernoctará.

   «El problema es muy claro: salarios en baja, costo de vida en alza, nuevos empleos menos remunerados que los que se pierden, el nivel de vida desciende», declaró Kerry en Canonsburg en un mitin realizado en Labor Day (Día del Trabajo en EEUU).

   Desde el viernes, Kerry empezó a centrar sus ataques en la gestión económica de la administración republicana, que considera su principal punto débil. «Es muy claro que la política económica del presidente Bush es mala para la clase media estadounidense», reiteró el candidato demócrata a la elección presidencial del 2 de noviembre, en Canonsburg.

   Por su parte el presidente republicano George W. Bush se encontraba en Missouri (centro).