Joseíto Mateo dijo que antes
se consumía “romo” y no drogas

Joseíto Mateo dijo que antes<BR>se consumía “romo” y no drogas

POR JOSELIN RODRÍGUEZ
Joseíto Mateo aseguró que en su época no se consumían drogas, porque esas sustancias no eran conocidas y todavía no estaban de moda.

“Antes lo que se ingería era mucho romo, porque beber whisky era un lujo muy grande. Las drogas no se usaban, eran desconocidas. Pero puedes estar seguro de que si las hubieran conocido también las hubiesen usado”, señaló el artista al ser entrevistado en Variedad TV.

“El Rey del Merengue” opinó que muchos músicos caen en el gancho y después tienen infinidad de problemas, por estar “inventando” y buscando otras cosas.

  Joseíto aseguró que nunca ha probado las drogas, porque hace años que se llevó de un consejo que le dio su gran amigo Héctor Lavoe, quien en un viaje a Nueva York le  recomendó no utilizar ningún producto que   le ofrecieran.

“Yo nunca me he metido en ese asunto, soy muy cobarde. No es solamente en las drogas que un artista cae en cosas malas, también en su manera de comportarse ante la sociedad y ante sí mismo. Hay que mantener la humildad ante todo y recordarse de dónde uno viene, dónde está y hacia qué lugar  va. Son muchas las cosas que hay que tener para que la gente te respete”.

Recordó que cuando él era uno de los mejores cantantes de su época, los artistas estaban obligados a  ser disciplinados, ya que la misma sociedad se lo exigía, mas ahora es distinto,  pues los tiempos cambiaron.

El artista reconoció que en ocasiones la fama es “fatidiosa” y “molesta”, por la persecución a la que se ven sometidos los  famosos.

 No le hace falta nada

A sus 87 años, de los cuales ha dedicado 72  al canto popular, Joseíto habla con una lucidez increíble. Su fortaleza de espíritu, su estilo alegre y bonachón y la entrega a su profesión lo hacen un digno  ejemplo a seguir.

  Su alegría por la vida la deja entrever en sus palabras cuando dice sin desparpajo: “A mí no me hace falta nada, gracias a Dios. Sólo espero tener unos añitos más para seguir disfrutando lo poco que he logrado conseguir”.

Considera que la juventud es una de las cosas mejores de estar vivo.

  Es por eso que sin poder contener la risa, dijo que cuando ve a los jóvenes bailar, a su memoria llegan recuerdos de cuando hacía eso mismo en su época.

“Aprovechen su juventud, hagan todo lo que desean hacer, pero moderadamente. No se excedan, porque eso es lo que hace más daño a la gente”, aconsejó a los más jóvenes.

       Joseíto relató que aunque  se “metió” en muchos problemas, no fue a causa de faldas, sino por defenderse de las acusaciones que le hicieron por haberle cantado al “ Jefe”, con las orquestas de ese entonces.

“Me metí en muchos líos, pero logré salir de ellos. Tuve que defenderme y mantener la verdad hasta que todo se aclare. Explicar todos esos problemas me costó muchísimo sudor y muchas mordidas y patadas”, rememoró el cantante.  

Ante la pregunta de que si en el país hacía falta un Trujillo, Joseíto se mantuvo neutro y dijo que prefería no opinar sobre el tema, porque “después me encuentro en un problema”.

Ser recordado

Joseíto se definió como una persona feliz, que tiene en claro su  manera de vivir.

 De manera reflexiva y sin titubear, afirmó que la única manera en que le gustaría ser recordado en el país es como Joseíto Mateo, bien o mal llamado Rey del Merengue, con su sombrerito de cana y cantando el ritmo criollo.

Otros ritmos

Contrario a otros artistas que han criticado el reguetón y el auge que ha tomado el llamado “merengue de calle”, Joseíto señaló que no está en contra de ellos, siempre que se hagan bien.

 Definió estos ritmos como una expresión procedente de los barrios, con su jerga y sus propios códigos de comunicación.

Joseíto señaló que en la música hay fusión, así como las hay en las artes, la comida y la raza.

Recomendó a los artistas tomar clases de dicción porque a veces no se entiende lo que  cantan y hay que escuchar el disco varias veces.

Publicaciones Relacionadas