Firme en la representación del merengue, ahora con un enfoque mucho más familiar que romántico, Joseph Fonseca se dio una vuelta por el país para presentar su más reciente éxito, “Caballito de palo”.

Esta canción, lanzada en 2013, cuenta con gran popularidad en países de Latinoamérica como Perú y Colombia. Sin embargo, su mayor pegada ha sido en la web con el video, pues desde su publicación en YouTube casi alcanza 35 millones de vistas.

Joseph, conocido por temas que ya podrían ser considerados clásicos del merengue, como “Que levante la mano” y “Noches de fantasía”, dice que la idea del “caballito” le llegó al ver unos niños jugar a galopar con unos caballitos de palo, y ha sido tal el impacto que esa idea hecha canción ha tenido en su carrera, que él considera ese instrumento de juego infantil como un amuleto de buena suerte.

Sobre el merengue, señala que está en un buen momento como género.
“A los merengueros nos tocó vivir un periodo de transición. Pasamos por la pérdida de la venta de discos, por el cambio generacional hacia una música más electrónica; pasamos por el proceso de que ahora casi todo es a través de la web, y seguimos estando aquí, seguimos vivos”.

Joseph añade que esto es algo de admirar, pues “hay muchos artistas y muchos géneros que no pasan esa transición, sino que se quedan con el cambio”.
Por el contrario -asegura- “el merengue seguirá y existirá por los siglos de los siglos”.

Es por esa seguridad hacia el merengue que nunca ha sentido la necesidad de incursionar en otro género de forma definitiva. “Soy de los merengueros que más trabaja, gracias a Dios y con eso nunca he inventado, solo hice un disco de bachata con el que me fue muy bien y aprendí muchísimo”, dice. Lo que sí ha hecho es evolucionar en cuanto al grupo demográfico al que se dirige, buscando ampliar su público.

La era de las redes. Para el boricua, el hecho de que estemos viviendo un intenso proceso de digitalización en todo el mundo implica que los artistas independientes deben de tener una nueva visión, pues ya no cuentan con estructuras de promoción internacional que los respalden, como hacían antes las disqueras.

“La multinacional del artista del merengue debe ser la web. ¿Por dónde te digo que es mi mayor éxito ahora mismo? Por la red”, señala el puertorriqueño.