Fue tras salir de unas bodas celebradas en el hotel Hilton Santo Domingo que el joven Raúl Vila perdió la vida cuando el Ferrari que conducía a alta velocidad se estrelló contra un poste del tendido eléctrico en la  avenida Abraham Lincoln casi esquina Gustavo Mejía Ricart.

Versiones recogidas entre familiares y amigos en la funeraria Blandino, donde ayer fueron velados sus restos, dan cuenta  de que el joven llegó al hotel,  en la avenida George Washington, en una yipeta, pero que al retirarse, cerca de las  12:00 de la noche,  pidió a su padre, Raúl Vila, intercambiar vehículos para   irse en el Ferrari.

De acuerdo con las mismas versiones, el joven fallecido había salido de la recepción nupcial disgustado con su novia Paola  Molina Suazo, que ayer se aferraba al  ataúd en la funeraria.

Además de sus padres Raúl y Perla, le sobreviven su hermano Miguel Raúl; sus abuelos Raúl Vila y Bienvenida Montás, entre otros familiares.  Sus restos serán sepultados hoy en Higüey, de donde son nativos sus padres.

Evitar

La Policía y la Amet dijeron que “seguirán trabajando duro” para evitar la competencia de automovilistas en la avenida Lincoln, tras la muerte el domingo de Vila al estrellarse su Ferrari contra un poste de luz, dijo el vocero de la Policía, general Nelson Rosario.

Solicitó  a los jóvenes que tengan conciencia  sobre el manejo temerario y a los padres  aconsejar a sus hijos para evitar desgracias.

Las investigaciones de la muerte de Vila son realizadas por la Amet. Al parecer hay versiones que niegan  fuera una carrera.