México.   Un joven campesino se prendió fuego este viernes frente al Congreso de Chiapas, un empobrecido estado del sur de México, en protesta por la detención de su tío, un líder social considerado por algunos como preso político, en el marco de un conflicto territorial, constató la AFP.   Ante las miradas de horror de los pasantes y el llanto desesperado de los niños presentes, Agustín Gómez, de 21 años, se convirtió en una antorcha humana por unos minutos luego que sus compañeros le rociaron gasolina y prendieron fuego.
Poco después, las llamas fueron sofocadas con cobijas y arena, mientras paramédicos trasladaron al joven a un hospital, donde se debate entre la vida y la muerte.   Desde hace casi un mes, miembros del Frente Ricardo Flores Magón han realizado toda clase de protestas para exigir la liberación de su dirigente, Florentino Gómez -tío de Agustín-, preso desde el 1 de mayo acusado de robar ganado.
Mientras un grupo de mujeres de esta organización realizan una huelga de hambre, otros miembros se han suturado los labios, crucificado y sacado sangre con el fin de llamar la atención de las autoridades. Muchas de estas personas se encuentran en un estado de salud delicado.   Los miembros de este frente aseguran que Florentino Gómez fue detenido de forma irregular y sin pruebas durante una manifestación, pero no han sido atendidos por ninguna autoridad.

La ONG de derechos humanos Digno Ochoa lamentó en un comunicado «la indiferencia e indolencia del gobierno» de Chiapas, liderado por Manuel Velasco del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI).   El Frente Ricardo Flores Magón mantiene desde hace años un conflicto territorial con otro grupo, simpatizante del PRI, en la comunidad de Chigtón, en el municipio de Ixtapa.   Chiapas, uno de los estados más empobrecidos de México y cuya población es mayoritariamente indígena, es históricamente escenario de violentas disputas entre etnias, que con frecuencia degeneran en masivos desplazamientos.

Hace unos 15 años, en Chiapas, otro campesino de inmoló en prisión, también en el marco de este tipo de conflictos territoriales, ocasionados por motivos políticos e incluso religiosos.