Con 26 años, 18 semanas de embarazo y una malformación cerebral que le produjo una hemorragia hace nueve días, el caso de Luz (nombre ficticio) mantiene en ascuas a las autoridades de salud de la República Dominicana ya que los neurocirujanos recomiendan que se interrumpa el embarazo pero el Código Penal lo prohíbe.
La joven madre está ingresada en el hospital Ney Arias Lora pero ningún médico puede actuar, debido a la condición de embarazo reciente. Luz es de una comunidad de San Francisco de Macorís.
La información fue confirmada por los doctores Nelson Rodríguez Monegro, director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud (SNS); y la doctora Mirna Font Frías, del Servicio Metropolitano de Salud.
La madre tiene otros dos hijos y sus familiares temen que el derrame cerebral, producto de la comunicación entre las arterias y venas, pueda volver a ocurrir y cobre la vida de Luz.
Por ello, el esposo ha autorizado a los médicos a practicarle un aborto terapéutico pero los gineco-obstetras del Hospital Materno Reynaldo Almánzar, que han emitido su opinión en torno al embarazo, revisaron la literatura médica y saben que no pueden actuar porque para ellos se trata de un tema ético, legal y moral.
Todos los comités de bioética de los hospitales Hospital Materno Reynaldo Almánzar, Ney Arias Lora y Centro Cardio Renal Oftalmológico y de Trasplante (Cecanot) se han reunido para opinar al respecto pero no han tomado una decisión final.
Especialistas. El doctor Ramón de León Berras, neurocirujano del Cecanot, fue enfático al decir que, aunque la mujer está estable, tiene una malformación cerebral y puede volver a sangrar.
En su criterio como profesional de la neurocirugía asegura que existen para esta paciente cuatro opciones. La primera de ellas es hacer una cirugía abierta para corregir la malformación, lo cual no está recomendado debido al nivel de invasión que requiere.
Otra opción que tiene la comunidad médica es la de una intervención endovascular, la cual requiere varias sesiones de radioterapia, lo cual generaría un daño severo a la criatura que, aunque sobreviva, podría terminar con cáncer, entre otras patologías.
El problema radica en que la radiación atravesaría la placenta y afectaría al feto. Esto podría provocar, explicó el doctor De León Berras, que el bebé nazca con severo retraso mental.
La tercera opción, indica, es quedarse de brazos cruzados y no hacer nada; y la cuarta, que es la que recomiendan los médicos, es hacer un aborto terapéutico y proceder a una embolización cerebral o una terapia endovascular.
“Hay que desembarazarla para poder embolizarla”, asegura el doctor Ramón de León Berras.
Sin consenso. Los doctores Rodríguez Monegro, Font Frías y Federico Núñez han reunido a los comités de bioética de los hospitales involucrados pero no han tomado aún una decisión.
Por el momento solo se conoce la opinión de los médicos del Hospital Materno Reynaldo Almánzar.
El director de ese hospital, doctor Rafael Dráper, asegura que sus médicos no practicarán un aborto terapéutico porque no creen que el caso así lo amerite. Además insisten en que, de acuerdo a la literatura médica que han consultado, en algunos casos de la madre ha sobrevivido.
En ese sentido, el informe del Comité de Etica de este hospital dice que no hay evidencia científica que demuestre que la vida de la paciente esté en inminente peligro por la coexistencia del embarazo.
Pese a ello, el Comité reconoce que el embarazo agrega morbilidad a Luz por su condición neurológica, es decir, que complica su cuadro clínico. “Sin embargo la literatura revisada avala una conducta más conservadora a fin de proteger y mantener el binomio”, concluye el Comité.
Ney Arias. El director del Hospital Ney Arias Lora, el neurocirujano Amauri García, rehusó referirse al tema porque está en manos de las autoridades competentes.
Esperancita. No es la primera vez que la prohibición del Código Penal al aborto en todas sus determinantes genera un debate. Uno de los casos más emblemáticos fue el de “Esperancita”, una joven de 16 años que se embarazó, tenía leucemia y no se le pudo aplicar el tratamiento porque implicaba un aborto terapéutico. La joven falleció.
Observación. El 19 de diciembre del año pasado el presidente de la República, Danilo Medina, observó la modificación al Código Penal porque penaliza de forma absoluta la interrupción del embarazo.
En la observación del Presidente se establece la despenalización del aborto cuando la vida de la madre corra peligro, el embarazo sea el resultado de una violación o incesto o si el feto contiene una malformación que haga inviable su vida.
La modificación del Código se encuentra en estos momentos en el Senado de la República pero los legisladores de la cámara alta aún no han puesto el tema en su agenda.