El juicio contra la señora María Magdalena Marizán continuó el pasado viernes con el testimonio de un menor que asegura que ésta le pagó dos millones de pesos para que ubicara a la joven Lohara Tavárez para que fuera asesinada.
El jovencito, cuyo nombre se omite por razones legales, expresó ante los jueces del Tribunal de Primera Instancia del Distrito Judicial de la Provincia Duarte que estuvo presente cuando Víctor Alfonso Brito (El Guachi), también juzgado por el caso, cometía el crimen. Empero, dijo que no tocó ni torturó a la víctima.
Tras escuchar al testigo, los jueces decidieron aplazar la audiencia para el próximo miércoles a las 9:00 de la mañana.
Sigue en prisión
Al culminar el proceso, la señora Marizán fue retornada a la cárcel de Salcedo, donde permanece recluida a pesar de que la Corte de Apelación dispuso su libertad. Según informes, esto se debe a que aún no se ha hecho efectivo el pago de RD$3 millones que le impuso como garantía económica la Corte de Apelación de San Francisco de Macorís.
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SCJ rechazó declinatoria
Desde su llegada a la justicia el caso Marizán-Tavárez ha generado fuertes conflictos en San Francisco de Macorís. En atención a ello la defensa solicitó la declinatoria del proceso, pero la Suprema Corte lo rechazó bajo el alegato de que las demandas de seguridad pública e interés de la justicia no justificaban el traslado.