Jóvenes abogan por ruptura del modelo político

Jóvenes abogan por ruptura del modelo político

Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio, con representantes de Grupos Populares Ariel Chino Sing, Judith López y Joelle Díaz de Santiago Protesta, Julio Pérez de Revoltiao Plataforma de Medios y Entretenimiento y Tefa de la Cruz Manifestante Individual. Hoy/ Pablo Matos 11/03/2020

Los muchachos de la Plaza de la Bandera y del Monumento a los Héroes de la Restauración, que protestaron masivamente por las suspendidas elecciones municipales del pasado 16 de febrero, abogan por una transformación del modelo político para que la corrupción, la impunidad, el secuestro de la justicia, y el poder en manos de una élite desaparezcan del escenario.
Esa maleta cargada de sueños, de adrenalina, de miles de seguidores en redes sociales, pretenden llevarla hacia un camino sin retorno porque consideran que los dominicanos llegaron al límite de la tolerancia, y en ese contexto dicen estar comprometidos con una lucha que les abra las puertas a las ideas nuevas, y a los valores de una democracia verdadera.
Esas posiciones fueron expuestas, en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio, por Ariel “Chino” Sing, Judith López y Joelle Díaz, del grupo Santiago Protesta; Julio Pérez, de Revoltiao; Estefanía de la Cruz, de Team UASD, y Eduardo Sánchez Tolentino, de Somos Pueblo.
Como representantes de estos grupos afirman que, si bien rechazan determinadas prácticas políticas, por antidemocráticas, están convencidos que los cambios que demanda el país no se logran sin una partidocracia fortalecida.
Por eso conminan a los ciudadanos a participar en las elecciones municipales de este domingo 15, para que, con el poder soberano de sus votos, escojan a los candidatos que les parezcan más idóneos.
El origen de las protestas. Al detectarse fallas aún sin esclarecerse en el voto automatizado, que se debía utilizar en 18 provincias en las elecciones de febrero, la Junta Central Electoral (JCE) decidió suspender esos comicios, posponiéndolos para este domingo.
La medida provocó la indignación de miles de jóvenes que, usaron sus plataformas digitales, para convocar a una protesta el 17 de febrero, en la Plaza de la Bandera, y luego en el Monumento a la Restauración, en Santiago.
Las manifestaciones se mantuvieron durante dos semanas, se extendieron hasta 28 provincias, a diversos países donde hay migrantes dominicanos, y los “Viewers”, “Followers” y “Most like” rompieron los records de las redes sociales más usadas.
Para esos jóvenes la JCE vulneró, con su decisión, el derecho al sufragio, y provocó un quiebre a la institucionalidad del país y una amenaza a la democracia.
Ese repudio colectivo coincidió con el de los partidos de oposición, los cuales atribuyen responsabilidad de las fallas del voto automatizado al oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Sin embargo, estos grupos dejan claro que sus luchas no tienen banderías políticas, y que no serán marionetas de ningún sector que esté en pugna con otro por intereses mezquinos y espurios.
“No deseamos que la República Dominicana colapse por irresponsabilidades, indiferencias o aspiraciones egoístas de otros”, afirman en un documento en el que sintetizan los porqués de sus protestas.
“El país que merecemos”. Chino Sing es un publicista y empresario de Santiago que ha participado en otras manifestaciones por el respeto a los recursos naturales, tiene como eslogan la lucha por el país “que merecemos”.
“Cuando se toca la democracia de una forma tan negativa nos duele, nos sentimos indignados, muy tristes, y estamos todos unidos por el mismo fin, que es el rescate de la democracia, la justicia electoral, la transparencia en las elecciones y un cambio real del sistema político”.
“Tenemos que salir de 20 años de lo mismo, de corrupción, de garantizar impunidad a una clase política que está recostada de un viejo modelo que no nos representa”, refirió.
Asimismo destacó que los jóvenes, en sus respectivos conglomerados, quieren romper con el ciclo de la impunidad, de la manipulación de la democracia para beneficio de un grupo.
“Estamos aquí por cada dominicano, no importa su estatus social, sus creencias religiosas o ideologías políticas. Jóvenes empoderados decidimos levantar la voz y vamos a cambiar el rumbo del país”.
Todos a votar. López, abogada de oficio y emprendedora, consideró que las elecciones del domingo deben tener la participación masiva de los ciudadanos, para delegar en los candidatos en los que creen cuotas de poder.
“Lo que estamos haciendo desde Santiago Protesta es mostrándole a la gente los candidatos y sus propuestas, para que conozcan por quiénes van a votar y lo hagan con conciencia”.
Asimismo expresó que, como parte de sus planes de lucha, participarán como observadores en los comicios, para ser los ojos de la ciudadanía y procurar transparencia.
“Pero además, no vamos dejar la lucha cuando pasen las elecciones, a los candidatos electos, cuando asuman sus cargos, les daremos seguimiento para ver qué cumplen y qué no”.

Educación política. Joelle Díaz trabaja en el sector hotelero, y ha estado involucrada en otras luchas sociales. Después de las manifestaciones de febrero lo que viene, según lo programado por Santiago Protesta, es tener un contacto más directo con los ciudadanos para enseñarles nuevas formas de hacer política, y que se empoderen en la lucha por sus derechos.
En ese orden expresó que ella, y otros cientos que expresaron su rechazo a un modelo político añejado, van a echar el pleito porque no tienen planes de irse del país “queremos ver cambios y lucharemos por ellos”.
La gran catarsis. Estefanía de la Cruz, estudiante de Economía que forma parte del Team UASD, afirmó que lo ocurrido con las manifestaciones de febrero fue una gran catarsis, porque la gente estaba cansada y se expresó expontáneamente.
“Cuando empezamos a reunirnos no solamente salieron expresiones en contra de la suspensión de las elecciones, sino también por la inseguridad ciudadana, corrupción, debilidad institucional.
“Una de las fortalezas de las manifestaciones ha sido esta catarsis colectiva, porque la gente se cansó de que todo quede igual. Y qué bueno que le perdimos el miedo a la política”.

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