Me mataron un hermano de 18 años, la Policía. Vendía ese producto (droga), empezó como a los 16. Yo veía que gente le llevaban hasta plancha para que le dieran del producto, mi padrastro y mi mamá lo votaron de la casa. Llegó una vez llorando porque lo tirotearon y me dijo yo estoy en eso pero no quiero que nadie en la familia esté involucrado.
Ese es el testimonio de Alexis Peña, de 18 años, uno de los más de 70 jóvenes que pertenecen al grupo Jesucristo Cambia las Vidas, donde reciben charlas y orientación sobre sus necesidades por un grupo de pastores, maestros.
El grupo, que inició hace cuatro meses con 24 adolescentes, se reúne en un anexo en la parte de atrás de la iglesia El Nazareno, en el sector Chavón, de Los Alcarrizos. Peña dice que el programa es muy bueno porque tratan temas de manera abierta, lo que no hacen en sus hogares ni escuelas.