Los dirigentes peledeístas Daniel Santos y Claudia Rita Abreu consideran que el uso del padrón abierto en las elecciones internas brinda a los ciudadanos la oportunidad de participar en las precandidaturas y no conformarse con la selección de los partidos, que muchas veces responden a intereses propios y no a lo que importa a las comunidades o la ciudadanía en general.
Entienden que unas primarias abiertas, simultáneas, manejadas por la Junta Central Electoral y obligatorias será el inicio de evolución y relevo natural de esas agrupaciones, porque permitirá el desarrollo de nuevos líderes, por lo que consideran ese punto debe estar en la Ley de Partidos Políticos.
Basan su defensa sobre que los que ganan los comicios dejan de ser solo representantes de sus organizaciones, para serlo del pueblo, por lo que les indigna el intento de manipular con el tema del “clientelismo” que recuerdan siempre ha existido y las votaciones primarias cerradas son “tierra de nadie”.
Abreu afirma que por esto son cosa común los votos marcados, las actas alteradas y otras irregularidades, “práctica que caracteriza a algunos agrupaciones y en los pequeños es normal tenerlo como un negocio familiar o un colmado de dos o tres”.
Ve intención de confundir a los militantes haciéndoles creer que las estructuras internas de los partidos dependerán de elecciones abiertas, lo que es falso.
“Decirle vendidos a los ciudadanos es ofenderles. Estudios internacionales indican que en Latinoamérica la compra de votos no representa ni un 1% de los sufragios, además ¿Quienes han comprado votos alguna vez han verificado si lo hacen a alguien inscrito en su propio partido?”, expresó y ve ese argumento como una excusa pos verdad.