Movidos por el deseo de ayudar a los más necesitados, jóvenes voluntarios reparan viviendas en el sector Las Malvinas II, de Santo Domingo Norte, donde ya se han beneficiado a  nueve familias.

Ayer que precisamente se celebró el Día Internacional de Lucha contra la Pobreza, los muchachos acudieron al sector para informarles a seis familias que serán las nuevas beneficiadas.

Las humildes viviendas son reparadas por los propios jóvenes, quienes por tres días se internan en el sector, duermen en la escuela y conviven con las familias  en una labor de acompañamiento. Para el 30 y 31 de este mes las viviendas serán habilitadas. 

Los voluntarios están agrupados en la organización Un Techo para mi País,     que se nutre de fondos privados, cuyo director comercial, Javier Líanez, explicó que escogieron ese sector debido a la pobreza extrema en que viven la mayoría de los residentes. La meta es reparar 50 viviendas al mes de diciembre.

Según Renato Corzo, director social, el proceso de escogencia de las seis familias fue duro, ya que en realidad todas necesitan un “empujón”.

Las viviendas son de 18 metros cuadrados, paredes y piso de madera y techo de zinc. “La idea es que no tengan más piso de tierra y que tengan un sitio digno donde convivir y criar a sus hijos”, dijo Líanez.

Para el presidente de la junta de vecinos, Heriberto Trinidad Ramos,  la iniciativa “ha sido una bendición para nosotros, ya que a veces nos cansamos de tocar todas las puertas sin ninguna ayuda”.

Destacó  la integración de los jóvenes en la comunidad creando  vínculo afectivo.