Jesús Soto Karass suele ser franco, y a sólo unos días de su regreso al ring para enfrentarse a Juan Carlos Abreu en el Casino del Sol en Tucson, Arizona, acepta que la edad ya le está pesando un poco y que el duelo ante el dominicano será vital para definir el futuro.
Soto Karass y Abreu estelarizarán la velada de Golden Boy Promotions que transmitirá ESPN a todo el continente americano mañana desde la fronteriza Tucson. Jesús llegará con récord de 28-12-4 y 18 nocauts por 19-3-1 y 18 nocauts del quisqueyano.

«Ya estamos afinando los últimos detalles para concentrarme en el peso, se viene una pelea aguerrida, Abreu es agresivo y más joven, se viene una pelea dura», dijo el sinaloense avecindado en California. «Siempre lo he dicho, el futuro es incierto pero estoy ya a lo mejor… ya se me hace más pesado el entrenamiento, lo hago con todo el amor pero ya cansa más, la bola… la bola de años, ya cada vez está más duro cada día», aceptó.

Soto Karass ha acostumbrado a los fanáticos a ser valiente en el ring sin importar el riesgo que corre, algo que obviamente ha ido mermando su físico pese a que él no falla en sus intentos de buscar la mejor forma para salir con la victoria en Arizona.
«Me ha respondido bien el cuerpo, no creo tener problema con la condición, la bola de años ya pesan, no es más difícil porque saco la experiencia, pero estoy más cansado, siempre lo hago con amor pero es un poco más pesado», recalcó Soto Karass.

Independientemente del resultado, dijo el mexicano que meditará muy bien su futuro. «No está en mi mente la derrota, si gano pues veremos lo que viene con responsabilidad”, dijo.