CIUDAD DEL VATICANO (AP).- Demacrado y algo jadeante, el papa Juan Pablo II saludó el miércoles a millares de peregrinos por medio de una conexión de video, en lo que constituyó su aparición pública más prolongada desde que salió de un hospital romano hace doce días.

   El Vaticano había proyectado originalmente que el Pontífice hablase directamente desde la ventana de su apartamento con los peregrinos congregados en la Plaza de San Pedro, pero en lugar de ello los funcionarios instalaron la conexión de video debido a las lluvias y vientos que azotaban la Santa Sede.

   Flanqueado por dos ayudantes y sentado en su estudio, el papa de 84 años leyó saludos en seis idiomas.

   «Saludo con afecto a todos los que se han congregado para la habitual audiencia del miércoles»», dijo el Papa, y expresó sus deseos de que la Cuaresma «nos conduzca a una conversión profunda y sincera»».

   En total, el Papa mantuvo la atención de la audiencia durante 30 minutos, el tiempo más largo que ha aparecido en público desde que regresó al Vaticano, el 11 de febrero. El Santo Padre se mantuvo alerta e impartió su bendición al final de la audiencia.

   Millares de peregrinos que se habían congregado en la plaza fueron llevados a un auditorio vaticano, donde se celebran las audiencias semanales pontificias. El grupo pudo ver a Juan Pablo en una pantalla gigante, y aplaudió cuando el Papa les dirigió la palabra.

   Cuando Juan Pablo fue dado de alta del hospital, el Vaticano indicó que coordinaría su programa de actividades con los médicos del Pontífice. El Papa padece del mal de Parkinson y dolencias de las rodillas y la cadera que le impiden desplazarse normalmente.

   Si bien el programa pontificio incluye audiencias con los ministros de turismo de Israel y la Autoridad Palestina el viernes y con el presidente de Azerbeiyán el sábado, el Vaticano ha aplazado toda confirmación de tales audiencias hasta que pueda determinarse si el Papa podrá participar en tales actividades.