JUAN SOTO HACE HISTORIA CON UN PODER DESCOMUNAL

JUAN SOTO HACE HISTORIA CON UN PODER DESCOMUNAL

Juan Soto de los Nacionales de Washington festeja tras conectar un jonrón ante los Cerveceros de Milwaukee, el domingo 18 de agosto de 2019. (AP Foto/Nick Wass)

Puede que su nombre no sea el más sonado entre los peloteros jóvenes de Grandes Ligas.
Su debut no fue tan promovido como el de Vladimir Guerrero Jr.
Su nombre no aparece en los titulares con tanta frecuencia como el de Fernando Tatis Jr.
Ni tampoco compite en las redes sociales con figuras como Eloy Jiménez.
Pero no se equivoquen, Juan Soto tiene tanta o más categoría de super estrella que el trío quisqueyano que debutó esta temporada.
Desde el año pasado, con los Nacionales de Washington, Juan Soto ha hecho historia con su ofensiva en los jardines del equipo de la capital de los Estados Unidos.
Y durante el fin de semana, se unió a un grupo más que exclusivo.
Al disparar su jonrón 28 de la temporada, Soto llegó a 50 en su carrera, apenas el tercer pelotero en toda la historia de las Grandes Ligas que alcanza ese total antes de cumplir 21 años.
El dominicano se unió a Mel Ott (61) y a Tony Conigliaro (56) como los únicos tres toleteros que han logrado la hazaña.
A Soto le faltan 66 días para cumplir 25 años, y seis cuadrangulares que le permitan igualar la marca de Conigliaro, y 11 para empatar a Ott.
Soto puede empatar a Conigliario si logra promedio de un jonrón cada 11 días, e igualaría a Ott si conecta en promedio un vuelacercas cada seis días.
Lo más llamativo de Soto es lo paciente que luce en el plato.
En su primera temporada en Grandes Ligas recibió 79 boletos y tomó 414 turnos al bate.
En este segundo año, ya ha recibido 77 transferencias en 412 turnos al bate, pero faltando un mes de campaña se espera que ronda los 90 o más boletos antes que termine la campaña.
Su porcentaje de embasarse de por vida es de .402, muy por encima del promedio de la liga.
Soto tiene excelentes condiciones físicas, es un pelotero organizado y ha demostrado que posee la herramienta más llamativa del negocio: el poder.
Puede que no sea tan estridente como muchos de sus compatriotas, pero no cabe duda que estamos ante un nuevo gran fenómeno del béisbol.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas