El juez Jorge Reyes, padre la joven asesinada el pasado domingo, Georgelina Reyes Abreu, declaró ayer que la familia del profesor que acusan del hecho y que también fue asesinado, no debe temerle, porque no emprenderá represalias contra quienes no sean cómplices del crimen.

Asimismo, le garantizó al hermano del profesor Gustavo Aurelio Vásquez Payán, Samuel Vásquez, que no debe temer, ya que no tratará de accionar legalmente contra los miembros de su familia, ni de quienes no estén involucrados en el hecho, porque la responsabilidad penal es de manera personal.

Reiteró que su actitud es de que se haga justicia y que de víctima, no va a pasar a ser victimario y que lamenta que la enfermedad que padece Samuel, se haya agravado por estas tragedias.

Reyes descartó nuevamente que su hija haya sido violada y posteriormente asesinada por algún hecho que estuviera relacionado con su trabajo de juez de la sexta sala de la Cámara Penal del Distrito Nacional.

El magistrado expresó que no duda que su hija fue asesinada por su ex profesor, Vásquez Payán, en la habitación 11 del Hotel Cabaña Centro, en la avenida 27 de Febrero 535.

En una entrevista concedida ayer a HOY, el magistrado advirtió que no permitirá que después de muerta, se quiera empañar la moral de su hija de 16 años de edad, ya que entiende que se han dicho cosas que no corresponden con la verdad.

«No voy a permitir que bajo ninguna circunstancia, nadie trate de empañar la moral de mi hija, porque aún esté muerta, eso lo voy a defender», advirtió.

Asimismo, llamó a todas las personas que tienen acceso a los medios de comunicación, a que antes de dar una información relacionada con la circunstancia de la muerte de su hija, que se comuniquen con él, tras advertirle que no quiere tener el gran dolor «de tener que actuar y proceder legalmente contra ellos por dar informaciones y defender personas involucradas en los hechos».

Sobre la denuncia de Samuel Vásquez Payan, quien al hablar para este diario el viernes, expresó que en la noche del pasado domingo la casa donde vivía el profesor junto a su madre y él estuvo vigilada por cuatro desconocidos por encargo del padre de la joven y que el martes la vivienda fue allanada por un ayudante fiscal y policías sin orden de cateo, el juez Reyes dijo que no se puede referir al caso, porque no participó.

Sostuvo que no tiene conocimiento de ese allanamiento y que las actas que se levantaron, deben estar en poder de las autoridades, por lo cual deben ser adaptadas de manera legal.

Reyes precisó que lo que le puede decir al hermano del profesor es que también sintió mucho la pérdida de Vásquez Payán, quien fue encontrado muerto el pasado jueves, en un paraje de la ciudad de Santiago.

Lamentó esa muerte, según dijo, sobre todo, por la madre de la víctima con quien dijo que se mantuvo en contacto lamentando los hechos de que su hijo no apareciera, al igual que su hija, quien estuvo desaparecida por casi dos días, hasta que fue encontrada muerta el 25 de este mes, en Mata Naranjo, San Cristóbal.

«Le doy mi más sincero y sentido pésame a ellos, como familiares, por la muerte de su hijo, que aún cuando hizo lo que hizo con mi hija, yo los entiendo a ellos como familiares de él, como ellos se sienten” indicó el juez Reyes, al tiempo de reiterar que su actitud siempre ha sido de que la justicia sea la que aclare y sancione los hechos.