La preservación del orden social obliga al legislador a ser cada vez más analista, cauto y reflexivo en procura de una sociedad más justa, planteó el juez de la Tercera Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia, Francisco Antonio Ortega Polanco, en la puesta en circulación de su libro Procedimiento penal apuntado,
No bstante, expuso que tampoco se puede pretender que solo la ley puede resolver los problemas de delincuencia que afectan a la sociedad, porque solo pueden ser resueltos con la combinación de acciones y de instituciones.
El acto se llevó a cabo en la Suprema Corte de Justicia y lo encabezó su presidente, doctor Mariano Germán Mejía, quien presentó la obra. El prólogo estuvo a cargo de Olga V. Herrera Carbuccia, jueza de la Corte Penal Internacional (CPI), y contó con la presencia del empresario José Luis Corripio Estrada; de los jueces Julio César Castaños, Alejandro Moscoso y Edgar Hernández, entre otros.