POR TANIA HIDALGO 
 Los abogados del imputado Ramón Báez Figueroa continuaron ayer incorporando ante el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional las alegadas pruebas documentales para desmeritar la acusación formulada por el Ministerio Público y las autoridades monetarias y financieras.

Juárez Castillo Semán insistió en su ponencia con la presentación de una serie de recortes de periódicos que recreaban la renuncia del entonces procurador general de la República, Virgilio Bello Rosa, disgustado, alegadamente, por la manipulación que había hecho el gobierno del ex presidente Hipólito Mejía al expediente del coronel retirado Pedro Julio  Goico  Guerrero (Pepe), el cual argumentó, fue  calificado de correccional para facilitar el descargo del militar.  

Castillo Semán mostró reseñas periodísticas sobre la “ola masiva” de retiros del Banco Intercontinental (BANINTER) ante los rumores de problemas financieros y las negociaciones que se realizaron con algunas entidades bancarias como el Banco del Progreso, cuyo acuerdo insistió en señalar fue aprobado por la Junta Monetaria, aunque posteriormente no se concretizó.

  Con relación al fraude del Baninter ascendente, según las autoridades, a 74 mil millones de pesos, son procesados además de Báez Figueroa, Marcos Báez Cocco, Vivian Lubrano de Castillo, Luís Alvarez Renta y Jesús María Troncoso Ferrúa.

Asimismo, Castillo Semán se refirió a la designación por parte de José Lois Malkún, entonces gobernador del Banco Central,  de una comisión para administrar los activos y pasivos de Baninter “sin tener autoridad para ello, ni estar previsto en la ley monetaria”.

El abogado mostró una información del primero  de mayo de 2003, en la que el funcionario dice que los bienes de la quebraba entidad podían suplir sus pasivos.

“Luego sale con el despacho de Hipólito Mejía con la mentira anunciada al país el 13 de mayo, de que en el Baninter habían borraduras, cuando su propio perito (Luis Aurich) ha dicho aquí que en contabilidad no hay forma de  borrar”, precisó Juárez.

Durante la audiencia y de manera reiterada los abogados de la parte civil constituida objetaban la intervención del abogado, toda vez que hacía valoraciones personales sobre el documento incorporado.

En medio de la monótona  presentación de copias de recortes de periódicos y al ver que el representante legal de Báez Figueroa incurría en la misma práctica, el abogado Ramón Pina Acevedo intervino para decir que si no había sanciones para los reincidentes, a lo que éste respondió:   “ah pero ya despertó”, lo que produjo la risa de los presentes y motivó que el juez presidente del tribunal Antonio Sánchez Mejía otorgara un receso al no poder contener la carcajada.

En la audiencia, el magistrado objetó por “impertinente” la incorporación de consultorías jurídicas realizadas por expertos legales tales como Manuel Bergés Chupani, tras acoger un pedimento hecho en ese sentido por los abogados de la parte civil constituida y el Ministerio Público.

El proceso continuará hoy a las 9:00 de la mañana con la continuación de la incorporación de pruebas por parte de Castillo Semán, quien junto a su padre Marino Vinicio Castillo (Vincho)  y su hermano Vinicio Castillo Semán, además de José Antonio Columna, constituyen la barra de la defensa de Báez Figueroa.

Hasta el momento, esta barra ha incorporado unos 50 documentos y restan cerca de 30.

De su lado, los abogados de la parte acusadora mostraron su satisfacción por el ritmo que lleva la incorporación de pruebas por parte de los imputados, “toda vez que son infundadas y en nada contribuyen a desmeritar la acusación”.