El juez de la Instrucción Especial de la Suprema Corte de Justicia, Francisco Ortega, ordenó ayer al Ministerio Público (MP) entregar a Andrés Bautista las pruebas que lo vinculan al caso de sobornos de la firma brasileña Odebrecht, con excepción de aquellas que están reservadas y que podrían implicar a otros acusados.
El magistrado dio un plazo de tres días al MP, vía la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), para ejecutar la orden.
De igual modo, fue rechazada la solicitud, por parte de Bautista, de un astreinte de 50 mil pesos contra la Pepca y su titular Laura Guerrero Pelletier.
En la sentencia, el juez sostiene que las partes tienen derecho a conocer las actuaciones o medios probatorios que realiza el MP, sin que eso signifique que el órgano persecutor deba revelar las pruebas que ha obtenido en la investigación.
Dijo que el acceso de las partes a las actuaciones procesales es que puedan hacer diligencias a su favor como parte de su derecho de defensa, lo que implica la obligación del MP de facilitar la ‘carpeta fiscal’ para que el acusado exprese la posibilidad de contradecir las pruebas que podría presentarse en su contra.
De igual manera, reconoce que el MP puede mantener en secreto actuaciones reservadas que serían fundamental para el desarrollo de la investigación, siempre que sean indispensables para el desarrollo de un acto concreto.

A su salida del tribunal, Bautista, presidente del PRM, mostró satisfacción por la decisión y dijo que busca el cumplimiento de un derecho que le asiste en la Constitución y las leyes: ser informado del proceso que el MP lleva en su contra.
Mientras que Carlos Salcedo, uno de sus abogados, dijo que la decisión es un triunfo para el estado de Derecho en la República Dominicana y que manda una luz de esperanza al país, ya que en su opinión, en el proceso penal, para las partes ninguna actuación del MP debe ser secreta.