Su vida fue una lucha constante a favor de la clase obrera, los pobres, la libertad, la justicia. Fundó y dirigió sindicatos, enfrentó al dictador Rafael Trujillo, a los invasores norteamericanos de 1965, a Balaguer.
La mayor parte de su tiempo en el país la pasó vigilado, perseguido, en la cárcel.
Pudo asilarse durante la tiranía trujillista y se marchó a Cuba donde se entrenó en guerra de guerrillas.
Participó en la destitución de Fulgencio Batista. Manejaba las armas con destreza.
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Estuvo entre los fundadores del Partido Socialista Popular (PSP), después Partido Comunista Dominicano (PCD).
Presidió el Sindicato Azucarero y el Sindicato Portuario de la región Este, en San Pedro de Macorís.
Justino José del Orbe fue historiador y escritor, aunque de pocos estudios. Dejó libros publicados e inéditos contando experiencias en los gremios, la Revolución Cubana, el exilio…
Ajusticiado Trujillo regresó a República Dominicana y defendió la constitucionalidad tras el Golpe de Estado al presidente Bosch, formando parte, durante la Revolución de Abril, del comando Aníbal Espinosa, donde fue impactado junto a Pedro Bonilla y el poeta dominico-haitiano Jacques Viau, por un disparo de mortero. Viau murió al instante.
Las heridas no lo doblegaron. Se trasladó al comando San Lázaro con esposa e hijos, herederos de su temperamento revolucionario. Uno de ellos, Manuel Antonio José, vino en expedición contra Trujillo en 1959. Fue fusilado.
Ninguno pasó factura a la Patria. Vivieron siempre en la pobreza. Solo queda Wilson, el hijo mayor que, a sus 83 años, arrastra una cadena de enfermedades y limitaciones.
De Justino José del Orbe queda la emblemática foto con una carabina Cristóbal durante la Guerra. Dejó también el recuerdo de sus conferencias en China, Suecia, España, Francia, Checoslovaquia, Unión Soviética. “Papá no tenía preparación intelectual, pero sí experiencias de vida”, significa Wilson, evocando los viajes de Justino por todo el oriente de Cuba y la Sierra Maestra, dictando charlas políticas, narrando vivencias del miliciano.
“Fue presidente del Comité de Solidaridad de la República de Norcorea”.
Contra Trujillo
Una de las primeras referencias sobre Justino aparece en el “Libro blanco del comunismo en la República Dominicana”, publicado por el régimen trujillista en 1956. Se remonta al 16 de diciembre de 1946, cuando Del Orbe era presidente del Gremio de Jornaleros.
Consigna que Dato Pagán Perdomo, él y Roberto McCabe Aristy “se convirtieron en ciegos instrumentos del materialismo marxista y el terrorismo que impone la disciplina que ordena Moscú”. Fue apresado junto a Ángel Miolán y a Víctor Manuel Ortiz. Sus mayores experiencias sindicales fueron junto al líder Mauricio Báez.
“Íbamos a ver a papá a la fortaleza México, en 1943, lo apresaron por dirigir la Federación de Marinos de San Pedro de Macorís”, cuenta Wilson. Al cumplir condena, el tirano le ofreció cargos que rechazó y volvió a encerrarlo, pero en la fortaleza Ozama. Luego lo confinó a su natal Villa Riva, “vigilado por un capitán”.
Justino organizó el movimiento obrero que culminó con el triunfo de la huelga de 1946 contra Trujillo.
Con la excusa de un chequeo médico, viajó a la capital y se asiló en la embajada de Venezuela, en 1949. Mauricio Báez le pagó el pasaje a Cuba y después logró unirlo a su familia. “Salimos en 1952. Llegamos a Camagüey y a La Habana. Nos reunimos en la calle “Sitios 312”. Residieron también en El Vedado.
Además de sus luchas políticas, Del Orbe trabajó como portamiras, en Cuba y, a su regreso al país, fue empleado en la UASD.
Cuenta Wilson que, ante el fracaso de las incursiones de 1959, Justino y Raúl García Rivas entrenaron dominicanos para venir en otra expedición y el Che Guevara los hizo desistir. “Ustedes son ya mayores, algunos padecen asma”. Del Orbe siguió movilizándose contra Trujillo en la Unión Patriótica Dominicana
Justino nació en Villa Riva, provincia Duarte, en 1910. Joven, se trasladó a San Pedro de Macorís. “Era alto, fuerte, amable. La gente le pedía consejos. No fumaba ni ingería alcohol. Tenía una sabiduría innata, se expresaba bien, buen analista, retenía muchos datos importantes”.
Estuvo casado con Altagracia del Orbe Mercedes, madre de sus hijos Manuel Antonio José, Henry Wilson y Nelson (Hipólito). Murió en 1988. Publicó “Mauricio Báez y la clase obrera” y “Del exilio político dominicano antitrujillista en Cuba”.
La calle
En 1996 el Ayuntamiento designó con el nombre Justino José del Orbe, una calle que con las divisiones geográficas quedó en Santo Domingo Este. No tiene rótulo.