Juzgados repletos de  demandas por   usurpación de títulos

Juzgados repletos de  demandas por   usurpación de títulos

Los juzgados están repletos de demandas por alteración de títulos de propiedad y compra de parcelas con documentos ajenos. Mientras que el 94 por ciento del territorio del país es propiedad de particulares y el Estado, con titularidad registrada en el Tribunal Superior de Tierras.

El presidente de la Fundación Pro Derecho de Propiedad (Fundepro),  indicó que en el Distrito Nacional no hay terrenos para dar paso a nuevas construcciones.

Explicó que existen dos tipos de propiedades: las registradas en el sistema del Tribunal de Tierras -en las que figura el 94 por ciento del país, con su propietario. Sostuvo que dentro de esos propietarios está el Estado.

Moquete, quien también es presidente del  Banco de la Tierra,  precisó que el restante seis por ciento de la tierra dominicana corresponde a lo llamados terrenos comuneros, como se concibe la tierra que no ha sido registrada en el Tribunal de Tierras. Aclara que lo comunero no es  una propiedad del Estado, como se creía.

Moquete expresa que FUNDEPRO se ha centrado en tres aspectos, el primero consiste en reforzar el derecho de propiedad. Atribuye la nueva Ley de Tierra al trabajo sistemático que realizan. “Dentro de esa vertiente de reivindicar el derecho de propiedad, hemos asumido la defensa, en particular, de los derechos de propiedad amenazados de los propietarios”.

Señala que en la ciudad de Santo Domingo hay zonas que se han convertido en “apaches -por no primar el orden”, y en las que afirma que nadie puede tener un solar. Entre estas áreas en conflictos menciona a Bocha Chica, Brisas del Este.

DN sin terreno

El ingeniero Moquete advierte que el  Distrito Nacional no cuenta con terrenos comuneros, debido a que todos los espacios están titulados. Explica que aun quedan terrenos bajo esta denominación en Puerto Plata, en Azua y en la zona de  la Frontera, sobre todo.    En cuanto a la zona de Brisas del Este, en el municipio de Santo Domingo Este, la describe como una zona en la que a todos los que tienen un solar se lo han invadido.

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