Karina Larrauri vive momentos de alegría por ser seleccionada para actuar en una película inspirada en un fraude bancario y que en forma de comedia le dará la oportunidad de demostrar sus cualidades. Junto a ella participarán Irving Alberti y Luis José Germán, compartiendo con otras personas de la televisión y el teatro. La Matriz es el nombre de la empresa productora que tiene base en España, Argentina y República Dominicana.

Karina hará el personaje de la novia de Irving, quien tiene el papel principal. Desde hace varias semanas se está en el proceso de lectura de guión, con orientación y dirección de Enrique Chao. Se realiza casting para terminar de reunir al elenco completo e iniciar la filmación.

Sin ser actriz profesional, pero sí con algunos conocimientos por haber iniciado un curso con Chao, se siente confiada en el proyecto y cree que hará un buen papel.

“Quien me ha sugerido y confiado en mi talento es Enrique Chao, a quien le dije que si no daba para el personaje que no me pusiera, porque no quería hacer el ridículo. Él me ha expresado que sí, que yo puedo actuar”.

Segura de que puede, se concentra en el guión para dar lo mejor. Como es una comedia, considera que maneja más la actuación. Las ofertas de pago son muy buenas.

La película, sin nombre todavía, aunque se menciona “Negocios son negocios”, se proyectará en Argentina, España, Nueva York, Puerto Rico y Santo Domingo.

[b]En televisión[/b]

Karina labora en “Con Freddy y punto”, programa al que entró con el pie derecho para estar al lado del productor. Es mucho lo que se ha querido polemizar, porque en un espacio anterior Milagros Germán compartía con Beras Goico.

“Milagros y yo nos reímos de eso. Nos llevamos bien y tengo que decir que ella es encantadora, además de excelente profesional. Al principio, mi entrada a Con Freddy y punto me causó problemas, porque algunas personas pensaban que le había quitado el puesto, lo que me parecía ridículo, porque ella tiene muchos años en la televisión y yo cuatro”.

Conflictos entre Karina y Milagros nunca han existido, porque la amistad y el respeto postergan cualquier polémica que quiera surgir por comentarios de la gente.

El aprendizaje es constante y Larrauri asimila que para posicionarse en el medio con credibilidad se requiere de tiempo. Por ahora no aspira a tener un programa sola y se apoya en fortalecer lo que le corresponde en “Con Freddy y punto”. Quien sube rápido así mismo baja, por eso va ganando un nombre con lo que presenta y hace cada día, sin dejarse llevar de lo que han logrado otras en poco tiempo.

Karina estará dedicada toda la vida a la televisión, pues es lo que le gusta. Fue un serio compromiso trazar como reto el trabajo con Freddy Beras Goico, a quien ya conoce un poco más a nivel personal y profesional.

“Estar al lado de Freddy es un reto todos los días, porque es una persona que te exige mucho y a la que se le debe respeto. Hay que llegar a la hora pautada y hacer bien la labor. Es una satisfacción poder estar frente a los televidentes con el señor Beras, porque me siento súper orgullosa de que me diera la oportunidad no sólo de entrar, sino de permanecer con él cuatro años”.

[b]Estilos de mercadeo[/b]

Karina no es mujer de calendarios ni de escándalos, sí de respeto a las demás personas que tienen el estilo de crecer y mercadearse. Califica de genial el recurso usado por Georgina Duluc, Melissa Guzmán y de otras jóvenes que son conocidas en todo el país.

“Siempre he dicho que no me sale hacer un calendario, porque no tengo esa formación. En Norteamérica hacer calendarios es parte del trabajo de cualquier presentadora. Me parece bien que quien quiera los haga. Yo no me atrevo”.

Madre de un niño de un año de edad, le saca el máximo al tiempo para estar a su lado sin dejar de cumplir con la responsabilidad laboral. Dice que es una mujer feliz.

[b]Lo que hace[/b]

– En la mañana ensaya para la película.

– Al mediodía en la emisora La 91.

– En la tarde vuelve a ensayar.

– A partir de la 5:00 graba para el programa.

– A las 8:00 de la noche está al frente de las cámaras en “Con Freddy y punto”.