La destacada atleta confiesa que su progenitora la hizo desistir de un intento de retiro del deporte y le aconsejó que llegado el momento deberá hacerlo por la puerta grande

“Recuerda que estamos hechas de hierro y que la vida tiene sus altas y bajas”.
Con esa expresión, la señora María Cristina Peguero Reyes hizo desistir del retiro de la competición de taekwondo a su hija Katherine Rodríguez, medallista panamericana y centroamericana y del Caribe.

“Mi madre entendía que aún me quedaba mucho camino por recorrer en el taekwondo, pero, sobre todo, que la motivación que le presenté no era válida”, expone Rodríguez.

Recuerda que su interés por el taekwondo prácticamente había desaparecido, como consecuencia del bajo rendimiento que venía registrando a partir de un cambio de categoría.

“Subí de menos 67 kilos a más de 73, eso es del peso medio a pesado y empecé a perder combates”, dijo. “Eso me hizo pensar que mi carrera había llegado a su final”, añadió.

Ante la situación, intervino su madre para recordarle que ambas estaban hechas de hierro y que cuando decidiera retirarse tenía que hacerlo por la puerta grande, no como consecuencia de derrotas consecutivos.

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“La escuché, como siempre, con mucha atención, seguí sus consejos y los resultados cambiaron”, asegura Katherine. “Lo que vino entonces fue asegurar mi clasificación para los Juegos Olímpicos Río 2016”, sostiene.

La ganadora de medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018 afirma que su madre es la “dueña” de su carrera como atleta y principal propulsora. “Ha sido mi temple y en gran parte la propulsora de esta larga carrera”, agrega.

Por igual, la señora Peguero Reyes es la fanática número uno de su hija. “Cuando salgo a una competencia, en el país o el extranjero, ella está pendiente de si hay transmisión de televisión para no perderse una sola de mis peleas”, dice.

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Narra, además, que su madre tiene una colección de publicaciones de periódicos, en los que se resaltan sus actuaciones internacionales.

Plato favorito
“Casi siempre que regreso de un viaje, mi madre me guarda ese sancocho, o en su defecto, unos guandules guisados, son mis platos favoritos”, reveló.

De cariño, la señora Peguero Reyes le llama Katy, igual que su padre, Domingo Rodríguez Guzmán y sus hermanos Angel Said y Luis José. Es la del medio de tres hermanos y el menor, Angel Said, también practica el taekwondo.